El volumen de negocio de los operadores logísticos españoles ha alcanzado el año pasado los 5.700 millones de euros, con un crecimiento de un 7,5% con relación a 2021, de acuerdo con los datos del Observatorio Sectorial DBK.
Este ritmo de crecimiento es inferior al que se registro un año antes, pero, al mismo tiempo, también da cuenta del notable dinamismo que todavía mantiene el mercado.
Por sectores de demanda, la industria de alimentación y bebidascontinúa constituyendo el principal segmento de actividad para los operadores logísticos. Concretamente, en 2022 ha concentrado un 41% del valor total del mercado. Por detrás se colocan los sectores de automoción y de farmacia, droguería y perfumería.
A su vez, el tipo de servicio que más ha contribuido al crecimiento del sector es el de almacenaje y otras operaciones en almacén, que representa casi la mitad de la facturación de los operadores.
Al mismo tiempo, también el segmento de transporte y distribuciónse ha incrementado en un 6,4% anual, con lo que ha pasado a suponer el 51% de la facturación total de los operadores logísticos españoles en 2022.
Según el análisis de DBK, a corto y medio plazo, el negocio de los operadores logísticos continuará al alza, aunque se prolongará la tendencia de desaceleración que se vive como consecuencia del freno en el crecimiento del conjunto de la actividad económica, la elevada inflación y el mantenimiento de los costes en niveles elevados.
Finalmente, pese a la entrada en el sector de nuevos competidores, sigue apreciándose una destacada concentración de la oferta, de tal modo que los cinco primeros operadores han acumulado en el año 2022 una cuota de mercado conjunta del 37%, mientras que los diez primeros copan un 55% del volumen de negocio de los operadores españoles.