"De cero a diez, legado y retos de la política de transportes de la Unión Europea"se puede descargar en este enlace (disponible en formato pdf, en inglés, de 13 págs y 2,0 Mb)
Durante los últimos años, la política europea de transportes se ha ocupado de problemas concretos que afectan a todos los países de la UE, como la congestión del tráfico aéreo y por carretera, la dependencia del petróleo y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, ha proporcionado financiación para dotar a las infraestructuras de transportes de los mismos niveles de calidad en toda la UE y ha centrado sus esfuerzos en aumentar la competitividad del sector europeo del transporte en un mercado mundial en rápida expansión.
Ahora, la Comisión Europea en esta nueva etapa tras las últimas elecciones europeas, se enfrenta al reto de continuar desarrollando la política en este sector, considerado estratégico desde el punto de vista de la integración europea.
Nuevos objetivos de emisiones para 2030
El 25% de las emisiones que genera el transporte en la UE se origina en las ciudades y pequeñas localidades. Por ello, la Comisión Europea se ha fijado dos objetivos para 2030. Por un lado, conseguir un transporte de mercancías, dentro de los principales centros urbanos, libre de emisiones; por el otro, reducir a la mitad el uso de los coches con combustibles convencionales en las zonas urbanas hasta su eliminación gradual en 2050.
En total, se espera reducir en un 80% las emisiones de gases de efecto invernadero en 2050, a través de los planes de Movilidad Urbana, que ya han sido aprobados en algunas ciudades como Madrid. Para ello, se impulsará el desarrollo de vehículos que funcionen con combustibles limpios, a la vez que se tratará de desarrollar la infraestructura necesaria para su repostaje.
1. Definir el Espacio Único Europeo
El transporte es una de las bases del proceso de integración europea y está firmemente vinculada a la creación y realización del mercado único europeo y el impulso económico. Por ello, las políticas de la UE se han centrado en integrar el mosaico actual de sistemas nacionales de carreteras, ferrocarriles, aeropuertos, ríos y canales en una red totalmente conectada y sin interrupciones: el Espacio Único Europeo.
Por ello, una de las prioridades para la Unión seguirá siendo completar la red de transporte transeuropea, TEN-T, y conseguir que los diferentes medios de transporte estén mejor integrados en una cadena sin fisuras tanto para pasajeros, como para mercancías, y con el mínimo impacto medioambiental.
2. Acelerar la implantación del Cielo Único Europeo
Tras 10 años desde su lanzamiento, el proyecto de Cielo Único Europeo aún no ha alcanzado plenamente sus objetivos. El proyecto fue diseñado para triplicar la capacidad del espacio aéreo, reducir los costes de gestión del tráfico aéreo y el impacto ambiental, así como para mejorar la seguridad.
Por ello, la Comisión Europea ha diseñado la iniciativa Cielo Único Europeo II+ con la que pretende dar un nuevo impulso al proyecto original. En este plan se proponen realizar cambios estructurales en el diseño del espacio aéreo europeo para que las trayectorias de vuelo se acorten y no se tracen en función de las fronteras nacionales.
3. Financiación de las infraestructuras de transporte
El objetivo de la nueva política de infraestructuras europea es eliminar los obstáculos y cuellos de botella, conectar la zona oriental con la occidental en un auténtico espacio europeo de transporte y hacer un mejor uso combinado de todos los medios de transporte de la manera más eficiente, confiable y limpia posible
Para ello, la financiación de la UE para las infraestructuras de transporte se ha triplicado hasta los 26.000 millones de euros hasta 2020, que complementarán las inversiones que realice cada Estado miembro en el desarrollo de la TEN-T. Esta financiación se centrará en la construcción de los nueve principales corredores de transporte, aportando las conexiones transfronterizas que faltan y eliminando las barreras.
4. El cuarto paquete ferroviario
El cuarto paquete ferroviario se centra en la revitalización el transporte ferroviario europeo para que alcance su pleno potencial y tenga una mayor cuota de uso. También se busca abrir el sector a una mayor competencia y mejorar la calidad y eficiencia del servicio.
Para ello, habrá que hacer compatibles tanto trenes como vías en cada Estado miembro, así como también armonizar las autorizaciones y los certificados de seguridad necesarios para circular.
5. Proyecto Blue Belt
Actualmente, el trayecto que realiza un buque entre Amberes y Rotterdam puede requerir la misma cantidad de papeleo que otro buque que viaje entre Rotterdam y Panamá. El objetivo del proyecto 'Blue Belt' es facilitar el tránsito de los buques entre los puertos europeos.
Esta iniciativa tiene como objetivo hacer el transporte marítimo de mercancías más atractivo y competitivo mediante la reducción de los costes y las demoras dentro del mercado de la UE, acortando la burocracia de cada país en las cinco áreas principales, aduanas, puertos, seguridad, controles fronterizos y sanitarios.
6. Inversión en investigación para el transporte y la innovación
La Unión Europea tiene programada una inversión de más de 6.000 millones de euros, dentro del programa Horizon 2020, para la investigación como una forma de estimular la innovación en el transporte y para ofrecer la próxima generación de aviones, trenes, coches e infraestructura más limpios y más eficientes.
7. Reducción del 7% en el número de muertes en carretera
Durante los últimos cinco años, ha habido una reducción anual de 7% en las muertes producidas en carreteras y se ha conseguido un descenso acumulado del 17% entre 2010 y 2013.
Si bien los índices de accidentes siguen siendo muy distintos entre los Estados miembros, la UE en su conjunto está en camino de cumplir su objetivo de reducir a la mitad las muertes en carretera en 2020, en comparación con los niveles de 2010.
Para 2050, el objetivo será conseguir la 'visión cero' de muertes en carretera a través de la mejora de los dispositivos de seguridad y de normas más estrictas en la inspección visual de vehículos y en las infracciones de los conductores.
8. Acuerdos para mejorar las conexiones aéreas de Europa con el resto del mundo
Hasta finales de 2013, la UE ha firmado ocho acuerdos internacionales para el transporte aéreo con Canadá, Georgia, Israel, Jordania, Moldavia, Marruecos, Estados Unidos y la zona occidental de los Balcanes. Además, hay abiertas negociaciones con otros siete países y se está estudiando entablar relaciones al respecto con otros seis estados y el grupo de países del Sudeste Asiático.
Los acuerdos permiten, gracias a la mejora en el acceso a otros mercados, que las compañías aéreas de la UE ofrezcan más rutas y servicios para pasajeros y empresas, así como también tarifas más competitivas
9. Corredores TEN-T
La red TEN-T está diseñada para que en el 2030 exista una red central que complete los eslabones que faltan, especialmente el transporte a través de las fronteras. Nueve corredores formarán la columna vertebral de esta red central, que unirán los principales cruces, ciudades, puertos, aeropuertos y otras terminales de transporte.
10. Derechos de los pasajeros
El último punto resaltado por la CE es la política europea sobre los derechos de los pasajeros, con la que se ha conseguido que los viajeros tengan más información sobre su viaje, reserva, precio del billete, daño en el equipaje o cancelaciones.