La Unión Europea ha tomado la decisión, a través de una reunión de urgencia del Comité Político y de Seguridad del Consejo, de unirse a la operación de los Estados Unidos en el Mar Rojo para salvaguardar el tráfico mercante.
Las instituciones europeas consideran que las acciones terroristas de los hutíes en aguas yemeníes suponen una amenaza para el comercio internacional y para la seguridad marítima, de manera particular para los tráficos de alimentación, combustibles y asistencia humanitaria.
Los Estados Unidos habían anunciado esta misma semana el inicio de la Operación Guardián de la Prosperidad, una iniciativa de seguridad multinacional que se centra en la seguridad en el Mar Rojo y que contempla la participación de varios países, como el Reino Unido, Bahréin, Canadá, Francia, Italia, los Países Bajos, Noruega, Seychelles y España.
La finalidad de esta iniciativa es, según el Departamento de Defensa estadounidense, "abordar conjuntamente los desafíos de seguridad en el sur del Mar Rojo y el Golfo de Adén, con el objetivo de garantizar la libertad de navegación para todos los países y reforzar la seguridad y la prosperidad regionales".
Por otra parte, los armadores europeos acogen con satisfacción este anuncio que, a su juicio, supone "un paso positivo para abordar los desafíos de seguridad en el Mar Rojo y el Golfo de Adén".
Ecsa considera que "los recientes ataques a buques comerciales en la zona del Mar Rojo son profundamente preocupantes. Acogemos con satisfacción el mayor compromiso de la UE y la cooperación internacional, e instamos encarecidamente a tomar medidas inmediatas para garantizar la seguridad y el bienestar de nuestra gente de mar y la seguridad de los buques comerciales que transitan por por la zona”.
Para la organización empresarial europea, el transporte marítimo es la piedra angular de la seguridad de Europa, desde la energía hasta los alimentos y la seguridad de la cadena de suministro, por lo que proteger las rutas marítimas clave y el principio internacional de libertad de navegación es esencial para garantizar la seguridad en el continente.
