La terminal Hutchison Ports Best en el puerto de Barcelona ha recibido al 'CMA-CGM Palais Royal', uno de los buques propulsados por Gas Natural Licuado más grandes del mundo.
Con 400 metros de eslora y 61 metros de manga, este portacontenedores con capacidad para 23.000 TEUs, fue construido en 2020. Su llegada no solo es histórica por su tamaño y capacidad, sino también por su contribución a la transición hacia una logística marítima más limpia y eficiente.
Las terminales de contenedores son puntos neurálgicos donde convergen múltiples actividades y pueden influir considerablemente en la huella ambiental de la cadena logística, con estrategias para reducir el consumo de energía, minimizar residuos y mejorar la gestión del transporte.
En su caso, la estrategia de sostenibilidad de Hutchison Ports Best se basa en promover cadenas de suministro sostenibles, priorizando el cuidado del planeta y las personas, y el fomento de prácticas comerciales éticas y sostenibles.
A su vez, se enfoca en la descarbonización de la actividad portuaria y las emisiones indirectas, lo que genera beneficios para las navieras al reducirse las emisiones de Gases de Efecto Invernadero durante su estancia en el puerto.
A partir de enero, este compromiso se traducirá en un ahorro en combustible y una reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, reflejándose en una disminución de los derechos de emisión de carbono gracias a la eficiencia energética y productividad ofrecida por Best.
Cabe destacar el compromiso de terminales como esta en proyectos innovadores como el de OPS, que ofrece la posibilidad que los barcos se conecten a la red eléctrica en el puerto, reduciendo así las emisiones mientras están atracados.