La expansión de la capacidad de las terminales a corto plazo se mantendrá en términos relativamente bajos.
Las perspectivas a medio plazo para el aumento de la demanda mundial de contenedores son positivas, teniendo en cuenta el nivel de crecimiento actual de las economías mundiales. A pesar de las dudas que está generando la evolución de las tarifas o la actual guerra comercial entre Estados Unidos y China, a largo plazo se prevén beneficios para todos los actores del mercado, según recoge la consultora Drewry.
En contra de esta visión positiva, la expansión de la capacidad de las terminales a corto plazo se mantendrá en términos relativamente bajos tras muchos años en los que se han realizado pocas inversiones, especialmente en proyectos sostenibles.
Como resultado, se espera que los niveles de utilización media se incrementen sustancialmente en casi todas las regiones mundiales para el año 2022. Las previsiones de la consultora de los últimos cinco años se basan en una media de crecimiento por debajo del 6% anual, elevando el tráfico mundial de contenedores a casi 240 millones de TEUs.
No obstante, la industria portuaria es actualmente de tal magnitud que un crecimiento anual del 6% equivale a casi 45 millones adicionales de TEUs cada año, lo que prácticamente supone el tamaño de la mayor terminal de contenedores del mundo, en Shanghái.
Analizando los datos en función de las terminales, se prevé un incremento de la capacidad portuaria de unos 125 millones de TEUs para 2022, lo que implica un crecimiento del 2%. Esto está claramente por debajo de la demanda proyectada y refleja que las inversiones en iniciativas sostenibles han sido mínimas en los últimos años.
En consecuencia, la media de utilización a nivel mundial pasará del 68% en el año 2017 al 80% en 2022. Los niveles se incrementarán de forma más notoria en la región de Gran China, el norte de Asia, el sudeste asiático y la costa oeste de Sudamérica.
Si la amenaza de una guerra comercial termina disipándose, la consultora confía en que numerosos terminalistas e inversores sigan aumentado sus niveles de actividad y por tanto, su capacidad. En cualquier caso, para ciertos mercados, puertos o terminales, la necesidad de capacidad adicional podría ser mayor.
El rápido crecimiento del tamaño de los buques ha llevado a una segmentación de la capacidad, de modo que a día de hoy, los puertos con infraestructuras suficientes para la gestión de buques más grandes son los más utilizados, mientras que los que no se han modernizado lo suficiente, están siendo infrautilizados.