Es necesario incentivar a los armadores para un reciclaje de buques más responsable.
Dictamen del CESE sobre el tema ‘El desguace naval y la sociedad del reciclado’que se puede descargar en este enlace (disponible en formato pdf, de 11 páginas y 68 Kb).
La mayoría de los buques retirados del servicio se desguazan de una manera inaceptable utilizando el método de "varada voluntaria", que consiste en encallar los buques en playas de arena, donde después son desguazados mayoritariamente por trabajadores no cualificados sin herramientas adecuadas y con una protección escasa o nula.
Así lo señala el Comité Económico y Social Europeo en su dictamen sobre el desguace naval y la sociedad del reciclado, en el que apunta que solo un pequeño número de propietarios de buques han tomado medidas voluntarias para garantizar un reciclado limpio y seguro de sus buques obsoletos.
En concreto, menos del 8% de los buques vendidospara desguace siguen teniendo un pabellón europeo y se desmantelan principalmente de manera segura y sostenible.
Cada año se venden para desmantelamiento aproximadamente 1.000 buques oceánicos, y más del 70% de estos buques terminan en playas de la India, Bangladesh o Pakistán para ser sometidos a peligrosas operaciones de desguace.
Incentivar a los armadores
Según el CESE, es necesario establecer un mecanismo que cree valor añadido en un buque al final de su vida útil que sea suficiente para pagar los costes más elevados de un reciclado responsable.
Así, aunque la mayoría del reciclado de buques probablemente seguiría produciéndose en países con bajos costes de mano de obra, se llevaría a cabo con mejores condiciones laborales y medioambientales. Al mismo tiempo, esto permitiría que los astilleros de desguace de la UE fuesen más competitivos.
En este sentido, en el Reglamento de la UE relativo al reciclado de buques, que será plenamente aplicable a más tardar el 31 de diciembre de 2018, falta un instrumento económico con el que la Comisión pueda encauzar los cambios en la dirección deseada.
Para solucionar este problema, recientemente se ha desarrollado un plan para dotarse de un instrumento de estas características, mediante la instauración de un "régimen de licencias de reciclado de buques (SRL)".
A finales de este año, la Comisión presentará una propuesta basada en esta idea, que incentivará a los armadores para que sus buques que hayan llegado al final de su vida útil se desguacen en instalaciones autorizadas por la UE con arreglo a procedimientos que sean social y medioambientalmente aceptables.