La Jornada 'Decisiones fundamentales para el transporte de mercancías en España y Europa', celebrada este miércoles 25 de febrero en Madrid, ha puesto de manifiesto la importancia que las administraciones públicas españolas, tanto autonómicas como regionales, y el Gobierno Central dan a los corredores ferroviarios europeos impulsados por Europa, además de su importante papel para el desarrollo económico del país.
Así, la necesidad de un transporte intermodal de mercancías, que ayude a reducir las emisiones y los costes de todos los sectores mediante una óptima combinación de carretera, ferrocarril y marítimo, ha quedado patente durante los últimos años al convertirse estos proyectos en una de las principales apuestas estratégicas en las políticas españolas y europeas.
En este contexto, durante la reunión de este miércoles, se ha puesto de manifiesto el potencial que presentan para las empresas españolas tanto el Corredor Mediterráneo, que cruza Andalucía, Murcia, la Comunidad Valenciana y Cataluña, como el Corredor Central, que permitirá conectar el puerto de Sines en Portugal con Europa a través de España, y la Travesía Central Pirenaica (TCP), especialmente importante para la economía aragonesa.
De hecho, Aragón ha organizado el foro, junto al Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, al que han acudido diferentes representantes institucionales, de los puertos españoles, del sector empresarial de las mercancías, cargadores, entidades financieras y organizaciones empresariales.
Travesía Central Pirenaica
Durante el mismo, desde el gobierno de Aragón han indicado la “necesidad imperiosa" de incluir la TCP en la próxima revisión de las Redes Transeuropeas, junto con un nuevo túnel ferroviario por el Pirineo Central, como parte de la Red Básica de Transportes de la Unión Europea.
Según las cifras manejadas por la administración se requiere una inversión de 15.000 millones de euros, en 20 años, para la Conexión Cantábrico-Mediterráneo y para un Corredor Central que, a pleno funcionamiento, supondría un retorno de 1.178 millones de euros anuales en el PIB español.
Corredor Mediterráneo
En el mismo contexto, desde la Consejería de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente de la Comunidad Valenciana han indicado que, a diferencia de lo que sucede en España, en la Unión Europea el transporte ferroviario de mercancías supone un porcentaje muy destacable.
Por eso, han resaltado la necesidad de apostar por un Corredor Mediterráneo que atraviesa cuatro comunidades autónomas y cinco grandes áreas metropolitanas, englobando casi la mitad del PIB y el 60% de las exportaciones a Europa.
Corredor Central
Por su parte, desde la Consejería de Fomento de Extremadura han apuntado que el Corredor Central es la conexión más directa entre las capitales de Portugal, España y Francia, por lo que han reivindicado la necesidad de inversiones para su modernización, que permitiría a la Península Ibérica convertirse en "la gran plataforma logística de Europa".
Además, en la misma línea, afirman que dichas inversiones tendrían un "rápido retorno" en forma de impulso a la competitividad e internacionalización del tejido productivo nacional y, por tanto, sería un "motor de creación de empleo".