La importación española de frutas y hortalizas frescas se ha situado en 2,7 millones de toneladas hasta agosto, con un crecimiento interanual del 11% y 2.955 millones de euros en valor, que suponen un 23% más, según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, procesados por Fepex.
El incremento se ha venido producido en todos los meses de 2023, con aumentos superiores al 10% en la mayoría, excepto en agosto, cuando se redujo el volumen un 11%.
En concreto, el volumen de frutas y hortalizas compradas al exterioren enero respecto al mismo mes de 2022 creció un 13%, en febrero un 16%, en marzo un 20%, en abril un 17%, en mayo un 12%, en junio un 5% y en julio un 18%.
En valor, el crecimiento de la importación española fue también muy elevado. En enero aumentó un 20,5%, en febrero un 18%, en marzo un 37,5%, en abril un 20,5%, en mayo un 25%, en junio un 17,5%, en julio un 29,5% y en agosto un 11%.
Este fuerte incremento de la importaciónhortofrutícola se viene produciendo desde hace tiempo. En la última década, creció un 52% en volumen, pasando de 2,5 millones de toneladas en 2013 a 3,8 millones de toneladas en 2022, y en el mismo periodo, el valor creció un 106%, pasando de 1.818 millones en 2013 a 3.763 millones en 2022.
Para Fepex, estos datos contrastan con el descenso del volumen de las exportaciones españolas de frutas y hortalizas. Muestran, además, el continuo crecimiento de la competencia exterior, impulsado por el marco regulatorio de la UE, mucho más restrictivo y exigente que las normativas de países terceros.
