La intensa actividad de los conductores profesionales impide que puedan hacer más ejercicio.
'Mens sana in corpore sano', como suele decirse, aunque con el ritmo de vida que se lleva hoy día, a veces la necesidad de hacer ejercicio se queda simplemente en un deseo imposibilitado por una actividad incesante, tanto a nivel profesional como personal.
En el caso de los conductores profesionales, la propia actividad pone fuertes barreras para poder realizar ejercicio físico en una profesión muy dada al sedentarismo, que, a su vez, es uno de los principales riesgos asociados a enfermedades cardiovasculares, hipertensión y algunos tipos de cánceres.
Ejercicio y alimentación, factores a mejorar
Según un estudio presentado por Scania realizado con 27.000 transportistas a los que se han efectuado exámenes de salud, un 60% de los profesionales del transporte por carretera no practica ejercicio, mientras que un 40% fuma a diario y un 55% no se alimenta de forma equilibrada, debido, sobre todo, a que los conductores suelen comer fuera de casa y en horarios adaptados a las pausas en la conducción.
Así mismo, un 32% de los transportistas sufren obesidad, un porcentaje mayor que la media de la población española y que constituye un factor que predispone a sufrir enfermedades como infartos, itus, artritis y que guarda una estrecha relación con un mayor riesgo de padecer algunos tipos de cáncer, especialmente de colón y de mama.
Precisamente la obesidad está relacionada también con los problemas óseos y articulares, que constituyen el 80% de las patologías de los profesionales del transporte y que, así mismo, también están relacionadas tanto con la postura estática al volante, como con los esfuerzos que se realizan durante las labores de carga, descarga, estiba y desestiba de las mercancías.
Por el lado bueno, un 21% de los profesionales del transporte afirma que hace deporte de manera continua, mientras que un 45% de los conductores padece hipertensión, un dato que está en la media del total del país. En definitiva, los principales riesgos de salud para los profesionales del transporte están relacionados con las llamas enfermedades silenciosas, que actúan a la larga, pero que, a la vez, son fácilmente prevenibles a través de simples cambios de hábitos.
Representantes de algunas de las principales asociaciones de transporte en la mesa organizada por Scania.
Ante esta situación de riesgo que viven muchos profesionales del sector, Scania y algunas de las principales asociaciones de transporte de mercancías y de viajeros por carretera abogan por introducir entre los conductores profesionales prácticas y hábitos saludables que contribuyan a mejorar su nivel de vida y su salud, en un contexto de escasez de conductores y de pérdida de prestigio de la profesión que, además, necesita de la colaboración de las administraciones, con el fin de que los conductores puedan contar con áreas de estacionamiento seguras, en las que poder dejar sus vehículos a salvo y poder realizar ejercicio.
Fruto de este trabajo, el fabricante, que se ha involucrado de manera muy activa en la promoción de la primera carrera del transporte, la Farinato Race, que tendrá lugar los próximos 14 y 15 de abril en el municipio madrileño de Quijorna, propone un decálogo saludable del transportista integrado por estas diez reglas:
1.- Beber ocho vasos de agua al día
2.- Llevar una dieta variada
3.- Realizar media hora de ejercicio al día
4.- Dormir siete horas seguidas
5.- Evitar el consumo de bebidas alcohólicas y de tabaco
6.- Aprender a controlar el estrés
7.- Acudir a revisiones médicas periódicas
8.- Parar y hacer ejercicios de estiramientos cada dos horas
9.- Atender las señales de cansancio al volante
10.- Fomentar las relaciones personales y cuidar la mente