La Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados, Asedas, ha presentado el II Informe de Distribución de Proximidad en España, elaborado por Retail Data. El sector ha mantenido su capacidad de resiliencia en 2022, a pesar de la difícil situación económica, y confirma una gran estabilidad en su evolución.
A ello han contribuido la capacidad de innovación, de inversión en la renovación de las tiendas, la variedad de formatos y empresas, la alta empleabilidad y una capilaridad que alcanza a todo el territorio.
La diversidad de las fórmulas comerciales se confirma también como un elemento diferenciador que aporta competencia al mercado. Los formatos representativos de la proximidad y conveniencia representan un 51,8% de la red comercial, lo que favorece la compra sin grandes desplazamientos y la sostenibilidad medioambiental.
Por otro lado, el sector de la distribución alimentaria de proximidad en España ha estado marcado en el último año por la guerra en Ucrania y su impacto en el precio de los alimentos.
Todos los eslabones de la cadena han trabajado para minimizar su efecto en la población, dicen desde Asedas, que recuerda que el Gobierno redujo el IVA de los alimentos frescos o de primera necesidad en el primer semestre de 2023.
También se ha abordado la digitalización del sector, que tras la pandemia se ha acelerado. Para impulsar esta transformación, desde la Secretaría de Estado de Comercio se han puesto en marcha cuatro líneas de ayuda destinadas a fomentar la digitalización y la sostenibilidad del sector, dotadas con 415 millones con cargo a los Fondos Next Generation EU.
Uno de ellos es el Fondo Tecnológico, dotado con 100 millones de euros para los años 2022 y 2023, que está destinado a las pymes y asociaciones comerciales, con el fin de ayudar al comercio de proximidad a adaptarse a los cambios de hábitos de los consumidores.
Cabe apuntar el impacto social de la distribución alimentaria de proximidad en España, pues casi el 97% de los habitantes tiene cobertura directa en su municipio, lo que es un dato muy positivo en términos de vertebración.
El 27,3% de las tiendas activas a finales de 2022 por las empresas de retail alimentario se ubican en municipios de menos de 10.000 habitantes, mientras que un 21,1% de las aperturas del último ejercicio corresponde a entornos rurales.