Traoré Colomba es un conductor canario joven, pero experimentado, que se encarga de cubrir la ruta más larga que realiza en este momento un camión eléctrico en España.
Concretamente, Traoré lleva a cabo con un conjunto de una tractora eléctrica y un semirremolque de lonas los servicios de transporte que una gran empresa textil tiene contratados con Lodisna para llevar mercancía en un circuito que se desarrolla entre la localidad madrileña de Meco y Zaragoza, con una distancia de unos 270 kilómetros.
Traoré realiza a diario este trayecto de ida y vuelta cinco veces por semana, de tal modo que tras varias semanas de prueba y con el servicio ya totalmente operativo desde finales de junio, ha aprendido a gestionar la autonomía del Volvo FH Electric de la empresa navarra en una ruta exigente, con constantes subidas y bajadas, pero que también permite que el sistema de recuperación de energía del vehículo pueda aportar un extra a las baterías para realizar el viaje con solvencia, incluso en condiciones de tráfico denso.
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La ruta
El vehículo parte de Meco a plena carga de sus baterías eléctricas y llega a la capital aragonesa con entre un cuarto y un quinto de su capacidad de almacenamiento de energía. En las instalaciones del cliente en Zaragoza se realiza una nueva recarga durante unas cuatro horas para el regreso a Madrid, donde se volverá a recargar para el servicio del día siguiente. Entre medias, el nivel de las baterías oscila cuando el terreno pica hacia arriba y se recupera con el aporte de energía recuperada en las bajadas.
Para Traoré, las principales ventajas del camión eléctricoque conduce se centran en la suavidad en la conducción, así como en la ausencia de ruidos y vibraciones, algo fundamental para unos chóferes profesionales que pasan muchas horas al volante.
Otro de los aspectos de los camiones eléctricos que llaman la atención de los conductores es el brío y el rendimientoque ofrece el motor desde el mismo momento en que se pisa el acelerador por primera vez, circunstancia que da una sensación de agilidad al volante.
De igual modo, la conservación de las baterías se convierte en una de las principales prioridades al volante, algo que obliga a los conductores de camiones eléctricos a aplicar técnicas de conducción económica, aprovechando las bajadas para recuperar energía, que puede llegar al 10% del consumo total durante el viaje, y calibrando la velocidad de bajada en las cuestas para cargar las baterías y aumentar la autonomía.
Sin embargo, parece que el uso de aire acondicionado y de todo el despliegue electrónico de conectividad de la tractora no afecta negativamente a la autonomía del pack de seis baterías, que ofrecen una capacidad total de 540 kWh.
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Desde el punto de vista de la empresas
Así mismo, más allá de las condiciones específicas de conducción, la unidad también tiene otros factores a favor, como el ahorro de costes, principalmente en combustible, y la reducción de las emisiones contaminantes, algo que grandes clientes como la empresa textil para la que se realizan estos servicios tienen muy en cuenta. Se estima que los camiones eléctricos también reducen los gastos asociados al mantenimiento, aunque como la ruta está funcionando en condiciones reales desde finales de junio, aún no ha habido tiempo para comprobar este extremo.
Los desarrollos electrónicos de la unidad también permiten una monitorización a tiempo realtanto del estado del vehículo, como del estilo de conducción, con lo que pueden programarse tareas de mantenimiento predictivo ante cualquier anomalía detectada y, por otra parte, también pueden corregirse las técnicas al volante para optimizar el rendimiento de las baterías, algo en lo que también ayuda la caja de cambios de doce velocidades i-Shift, entre otros aspectos.
Sin embargo, el alto coste de los vehículos eléctricos sigue siendo un elemento que juega en contra de la electrificación de la flota de transporte, aunque parece que la oferta se está moviendo con lo que es plausible que a medio plazo se acomoden los precios de los camiones eléctricos.
En estas condiciones, se hace imprescindible que empresas de transporte, clientes y marcas trabajen conjuntamente para encontrar aquellas rutas en que las sinergias permitan un uso sostenible y eficiente de vehículos eléctricos.
Javier Avello, director de Innovación de Lodisna, defiende que la iniciativa es muy interesante tanto para la empresa, como para sus clientes y adelanta que la compañía navarra ya trabaja para ampliar el uso de los camiones eléctricos a dos posibles nuevas rutasen Navarra y en el centro peninsular.
La experiencia de empresas como Lodisna marca el camino de la electrificación del transporte pesado, una incipiente revolución que ya está en marcha y que ganará velocidad de crucero a medida que crezca la oferta industrial y las empresas del sector puedan percibir más claramente la ventaja competitiva que supone.
