Los asistentes a la Jornada de Distribución Urbana de Mercancías, organizada por el Centro Español de Logístic, han podido ver dos vehículos eléctricos puros dedicados a la distribución.
Primeramente Ramón García, director de Innovación y Proyectos del Centro Español de Logística, hizo una revisión de los problemas que existen en la distribución urbana de mercancías, con una especial referencia a las vías de optimización y buenas prácticas que pueden servir para mejorar. García se centró en el canal HORECA, como paradigma de la distribución urbana.
En su opinión, las tendencias que marcarán el futuro del sector son la colaboración entre los diferentes agentes de la cadena de suministro, los almacenes colaborativos, las rutas de reparto compartidas, los centros de consolidación y la aportación que pueden ofrecer las tecnologías de la información.
Como colofón a su intervención, García desgranó los objetivos del Grupo de Trabajo sobre Distribución Urbana de Mercancías planteado por el CEL como un comité centrado en identificar las buenas prácticas en la distribución urbana, definir los puntos críticos, buscar recomendaciones y llegar a acuerdos que puedan servir en el sector. La primera reunión de este Grupo de Trabajo está planteada para el próximo mes de abril.
Movilidad sostenible
A continuación, Eduardo Zapata, secretario general de UNO, se centró en analizar el impacto del uso de vehículos alternativos en la reducción de emisiones contaminantes, desde el punto de vista de los operadores logísticos. Para ello, Zapata hizo hincapié en la necesidad de encontrar soluciones colaborativas que sirvan para combinar un buen nivel de servicio, la eficiencia y la rentabilidad de las empresas con la lucha contra la congestión y el mantenimiento de la calidad del aire en las ciudades.
El secretario general de UNO describió la experiencia práctica de algunas empresas pioneras en el uso de vehículos eléctricos, para concluir que los cambios en la logística son complejos, requieren el aporte de las tecnologías de la información, no existiendo soluciones únicas para la distribución urbana. Además los nuevos combustibles ofrecen soluciones de futuro sobre las que penden incertidumbres que se irán diluyendo con el paso del tiempo.
Como punto final, Arturo Pérez de Lucia, director gerente de AEDIVE analizó la funcionalidad de los vehículos eléctricos para lamovilidad sostenible. Desde su punto de vista, vamos hacia un concepto de redes inteligentes en las que el vehículo eléctrico asume un importante rol como elemento normalizador.
Para Pérez de Lucía, el vehículo eléctrico tiene una serie de desafíos como su autonomía, aunque se están produciendo grandes avances en este campo, la necesidad de desplegar una infraestructura de recarga acorde a las necesidades de sus usuarios, la creación de una regulación que garantice la fiabilidad de las infraestructuras de recarga, la estandarización de los conectores y el desarrollo de tecnologías de la información que garanticen una adecuada interoperabiidad de las infraestructuras de recarga.