El desarrollo de la nueva terminal de contenedores de la ampliación norte del puerto de Valencia tendrá un impacto muy positivo sobre la actividad del recinto y la economía de toda la Comunidad Valenciana.
Según un estudio presentado por la Universidad Politécnica de Valencia, en 2030, con la nueva terminal a pleno funcionamiento, el impacto económico del puerto de Valencia representará en términos de valor añadido el 2,27 % del conjunto de la Comunidad Valenciana.
De igual modo, el análisis estima que también se producirán mejoras muy importantes en los costes de transporte y beneficios para la sostenibilidad ambiental por la construcción o mejora de nuevas obras y servicios.
La necesidad de un acceso norte al puerto
De igual modo, el trabajo defiende que “la construcción de un acceso norte al puerto supondría mejoras importantes sobre los tráficos al puerto y sobre el tráfico general y deviene una necesidad”.
Según los análisis, los ahorros en costes que generaría el acceso norte serían considerables alcanzarían del orden de los 53,3 millones de euros al año por, así como otros 18,8 millones anuales por descongestión.
Por otra parte, el informe de la UPV también concluye que al ritmo previsto de crecimiento del tráfico de contenedores en el puerto de Valencia, la capacidad existente de depósitos de contenedores vacíos se agotará en diez años.
De igual modo, el estudio considera que la bolsa de suelo de las zonas logísticas vinculadas con la actividad portuaria, como son Parc Sagunt y Ribarroja, “se encuentra seriamente comprometida” y, al tiempo, incide en la necesidad de adecuar y desarrollar las instalaciones intermodales de Sagunto y Valencia-Fuente de San Luis.