La naviera Kawasaki Kisen Kaisha, 'K' Line, planea reforzar su flota con el pedido de nuevos buques de GNL y graneleros durante los próximos años. Así se especifica en su nueva estrategia para el periodo comprendido entre 2015 y 2019 en el que también se proyecta enviar al desguace varios de sus portacontenedores.
En concreto, el grupo prevé reducir su flota de buques para el transporte de contenedores de 70 a 61 hasta 2019. Sin embargo la capacidad de TEUs seguirá aumentando, ya que se desguazarán los buques más pequeños a la que vez que se incorporan otros 10 buques de 14.000 TEUs que están en fase de construcción.
En cuanto a los graneleros, está previsto aumentar el número de Capesize de 85 a 100, mientras que los post-Panamax pasarán de ser 69 a 75 en 2019. Los metaneros aumentarán de 43 a 61 y los buques ro-ro de 96 a 98.
Todas estas previsiones se encuentran dentro de este plan a medio plazo que ha anunciado la naviera recientemente y en el que se proyecta elevar el beneficio neto a más de 600.000 millones de yenes (4.480 millones de euros), un 240% más con respecto a la cifra actual.
Antes de que finalice el 2019, 'K' Line prevé tener una flota de 564 buques, una cifra un 7% superior a la que actualmente tiene la naviera, con 526 embarcaciones. En total, para esta renovación de la flota y servicios de la naviera, se estima una inversión entre 2015 y 2019 de 330.000 millones de yenes (2.470 millones de euros).