En el primer trimestre de 2013, IAG, la compañía resultante de la fusión de Iberia y British Airways, ha registrado unas pérdidas después de impuestos de 630 millones de euros frente a los números rojos de 129 millones de euros en el mismo periodo del ejercicio anterior.
La cifra de negocio en los tres primeros meses del año alcanzó los 3.939 millones de euros, lo que supone un ligere crecimiento del 0,5% frente a los 3.919 millones del mismo periodo del 2012.
El grupo registró unas pérdidas operativas de 589 millones de euros, lo que supone multiplicar casi por tres sus números rojos con respecto al mismo trimestre del ejercicio anterior, cuando perdió 212 millones de euros.
El efectivo, situado en 2.833 millones de euros al cierre del trimestre, disminuyó en 76 millones de euros y la deuda total del grupo a 31 de marzo de 2013 ha descendido un 8,3% registrando una cifra de 1.732 millones de euros frente a los 1.889 millones a finales de 2012. También ha descendido un 13,3% el patrimonio neto ajustado con un total de 4.383 millones de euros mientras que el año anterior terminó con 5.055 millones.
Cabe destacar que los costes de combustible en el trimestre disminuyeron un 3,4% hasta 1.361 millones de euros. Los costes unitarios de combustible bajaron un 1,5%, y los costes unitarios excluido el combustible aumentaron un 5,8%, o un 4,9% a tipos de cambio constantes.
Este crecimiento de los costes unitarios, excluido el combustible, es uno de los factores que la compañía ha asegurado que ha influido negativamente a sus resultado. Asimismo también ha achacado estas pésimas cifras al recorte de la capacidad de Iberia y al aumento de la plantilla de British ante la previsión de la llegada de las nuevas aeronaves este año.
Sobre la reestructuración de personal en Iberia, el grupo ha asegurado que una vez aceptada la propuesta del mediador, “hemos provisionado 265 millones de euros adicionales para costes de reestructuración de personal junto con los costes relacionados con la retirada de aeronaves dentro de las partidas excepcionales”.
Sobre las perspectivas de negocio el grupo ha anunciado que debido a la obligación del Grupo de conseguir la aprobación de los accionistas para los pedidos de reemplazo de la flota para British Airways ya anunciados y la consiguiente obligación de informar sobre cualquier previsión de beneficios pendientes como parte de ese proceso, IAG no va a facilitar ninguna orientación a nivel del beneficio operativo para el 2013.
"La evolución actual del negocio se encuentra en línea con nuestras expectativas" ha matizado la compañía que prevé reducir para este año la capacidad del Grupo en un 1,8% y mantener el coste unitario excluido el combustible constante en comparación con el año pasado.
Nueva estructura directiva de Iberia
Por otro lado, el nuevo consejero delegado de Iberia, Luis Gallego, ha renovado el equipo de dirección de Iberia, dentro de su plan de transformación, que implica la desaparición de las direcciones generales y la reducción a nueve del número de directores que reportarán directamente al nuevo consejero delegado.
La nueva estructura directiva potencia la dirección de Desarrollo de Red y Alianzas, según la directiva es un “claro símbolo de apuesta” por el futuro de la aerolínea “una vez se consiga la base de costes que garantice su competitividad”. Asimismo, se agrupa la gestión corporativa de RRHH, Seguridad y Responsabilidad Social.