En noviembre de 2021, el Gobierno aprobó una línea de ayudas, dotada inicialmente con 174 millones, para la renovación de la flota de transporte por carretera hacia vehículos menos contaminantes así como el achatarramiento del actual parque de camiones y autobuses.
Desde su puesta en marcha en marzo de 2022 por las Comunidades Autónomas, encargadas de gestionar dichas ayudas, la práctica totalidad de las solicitudes presentadas han ido dirigidas al achatarramiento de vehículos.
Las otras líneas de ayudas para la compra de vehículos propulsados por vehículos eléctricos o de hidrógeno apenas han tenido acogida, como era de prever, dada la escasa o nula oferta.
Así, según ha podido conocer Fenadismer, una gran parte de las Comunidades Autónomas han agotado en pocos meses el presupuesto inicialmente adjudicado para para el achatarramiento, dado el aluvión de solicitudes presentadas por los transportistas.
Pueden solicitarlas todos los vehículos de transporte actualmente en circulación matriculados antes del 1 de enero de 2019, siempre que cuenten con una autorización de transporte al menos en los dos años anteriores a la solicitud de la ayuda, sin necesidad de tener la ITV en vigor.
Aunque el presupuesto total para este Plan que plantea el Gobierno es de 400 millones a repartir en tres años, en concreto hasta abril de 2024, es previsible que dichos fondos se agoten mucho antes, alcanzando antes de lo previsto el objetivo de achatarrar 20.000 camiones y 3.000 autobuses.