De manera paulatina, los ensayos de conducción autónoma de vehículos van ganando nuevos actores que también inician experiencias serias en el ámbito del transporte de mercancías, tanto en el segmento de ligeros, como en el de pesados.
De este modo, lo que hasta hace bien poco tiempo parecía ciencia-ficción, cada vez parece, no solo más factible, sino que se acerca a gran velocidad, ya que cada vez más empresas ven en esta tecnología un instrumento que permitirá ganar eficiencia y flexibilidad en el transporte por carretera
Google ha anunciado, a través de su filial de conducción autónoma Waymo, que está dando un fuerte impulso a su proyecto de puesta en marcha de camiones pesados, así como de vehículos para servicios de reparto de última milla, teniendo en cuenta las particularidades que ofrecen en aspectos claves de la conducción como es el tiempo de frenado, el radio de giro y la existencia de puntos ciegos que también deben controlarse.
Waymo ya ha llevado a cabo pruebas piloto con camiones autónomos en Atlanta, donde se lleva a cabo servicios de transporte de carga entre los centros de datos de Google, y, de igual modo, también utilizan estas unidades en California, Arizona y Georgia, aunque ahora planea nuevas experiencias con terceros para seguir testando esta tecnología.
Para el desarrollo de las unidades, la filial de Google trabaja con diferentes actores de la industria automovilística para montar sus dispositivos de conducción autónoma sobre vehículos de serie.