El impuesto autonómico sobre los carburantes será fijado a partir de ahora por el Estado, lo que supondrá una equiparación de su importe en todas las autonomías.
La previsible declaración de ilegalidad de la regulación del impuesto autonómico sobre los carburantes ha obligado al Gobierno a rectificar por segunda vez su normativa reguladora, mediante una propuesta de modificación en los Presupuestos Generalesde 2018 para eliminar la capacidad de las autonomías para fijar el tipo impositivo a aplicar en sus respectivos territorios.
A partir de su entrada en vigor, el impuesto será fijado y recaudado por el Estado para su reparto a las Comunidades Autónomas, lo que supondrá una equiparación del importe en su nivel máximo. Esto llevará a una subida de hasta el 100% en Castilla-León, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, Madrid, Aragón y Extremadura, donde la fiscalidad de los carburantes se incrementará en hasta 4,8 céntimos por litro.
Desde Fenadismer, recuerdan que el aumento de la carga impositiva se está compensando a través de la devolución del gasóleo profesional a los vehículos de transporte de mercancías de más de 7,5 toneladas de peso máximo autorizado.
Sin embargo, quedan fuera del régimen de devolución los de menor tonelaje, mayoritariamente propiedad de transportistas autónomos, que tendrán que soportar íntegramente el incremento de la subida del impuesto de hidrocarburos prevista.
Por ello, en la Federación plantean a los diferentes partidos políticos la modificación de la actual regulación de la figura del gasóleo profesional incluyendo como beneficiarios a los vehículos de transportes de mercancías de menor tonelaje, que representan casi una tercera parte de la flota de transporte en España.