Rumanía, entre los países reticentes al espacio ferroviario único europeo.
La Comisión Europea ha llevado Grecia, Luxemburgo y Rumanía ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea por no haber incorporado a sus normativas nacionales la Directiva 2012/34/UE, por la que se establece un espacio ferroviario europeo único.
Según indican desde el organismo, los Estados miembros tenían de plazo hasta el 16 de junio de 2015 para adoptar las medidas necesarias para cumplir con la Directiva. Puesto que Grecia, Luxemburgo y Rumanía no lo hicieron, en julio de 2015 la Comisión envió a estos una carta de emplazamiento, seguida de un dictamen motivado en febrero de 2016.
Ahora, en vista de que aún no han adoptado las medidas de transposición nacionales, la Comisión les ha llevado ante el TJUE y solicitará al Tribunal que imponga a Grecia, Luxemburgo y Rumanía multas coercitivas diarias hasta la plena transposición de la Directiva. La Comisión ha propuestos multas coercitivas diarias de 30.310,80 euros para Grecia, 8.710 euros para Luxemburgo y 29.091,40 euros para Rumanía.
El papel del espacio ferroviario único
La Directiva 2012/34/UE tiene por objeto reforzar el papel de los organismos reguladores nacionales, en particular por lo que respecta a sus competencias en materia de instalaciones ferroviarias, tales como terminales y estaciones.
Por ello, obliga a los Estados miembros a basar sus relaciones con los administradores de infraestructuras en contratos plurianuales que establezcan obligaciones mutuas, en cuanto a la estructura de los pagos y la calidad de los servicios de infraestructura que deben proporcionar las empresas ferroviarias.
La norma también contiene requisitos de transparencia financiera, para que las empresas ferroviarias y los administradores de infraestructuras lleven y publiquen cuentas separadas y controlen los flujos financieros.