La tendencia en el control aéreo es la digitalización y la automatización. Así se ha puesto de manifiesto durante una jornada sobre 'Torres remotas en los aeropuertos y su viabilidad en España', organizada por la Universidad Pontificia Comillas y la Asociación Española de Derecho Aeronáutico y Espacial, con la colaboración de la Sociedad Aeronáutica Española.
En ella, ha participado el director de Servicios de Navegación Aérea de Enaire, Enrique Maurer, que ha explicado la apuesta de la entidad por la digitalización de las torres de control, incluyendo la gestión en remoto de las mismas, para dotarles de una mayor eficiencia, sobre todo en condiciones de visibilidad reducida.
Una torre de control remota supone la prestación de servicio de tránsito aéreo de control desde ubicaciones sin observación visual directa y sin proximidad. Este servicio puede utilizarse para el propio control del aeródromo o como servicio de información de vuelo, de forma permanente, puntual, en ciertas horas del día o para medidas de contingencia del aeropuerto.
Desde la perspetiva de Maurer, las torres de control del futuro tendrán un mayor grado de automatización, lo que favorecerá una contribución mayor de los sistemas a la mejora de las operativas.
La mejora de la visibilidad redundará en una mejora de la seguridad, con nuevas funciones de alerta y conformidad, y en una mejora de las operativas en aeropuertos complejos, así como en situaciones meteorológicas adversas.
También facilitará la fluidez de las operaciones y reducirá los costes de infraestructuras y los gastos de explotación. Al mismo tiempo, permitirá integrar la información de los sistemas, aumentar la visualización y automatizar la presentación visual del tráfico.