La menor producción automovilística registrada en España durante 2021, junto con la irregularidad y la imprevisibilidad en la actividad industrial de las plantas de fabricación ha repercutido negativamente en el transporte de vehículos terminados por ferrocarril.
Según el último informe de valoración logística de Anfac, el año pasado se han movido por ferrocarril un 21,4% menos vechículos terminados que en 2020. Como consecuencia, la cuota de este modo ha retrocedido del 14% de 2020 al 11,6% del pasado ejercicio.
Como consecuencia, la valoración del servicioque ofrece el transporte ferroviario a la industria automovilística española se ha estancado con un índice de 3,3 puntos sobre un máximo de cinco, según Anfac. En el caso de los servicios nacionales, el indicador es de 3,2 puntos, mientras que para trayectos internacionales queda en 3,6 puntos. Así mismo, el transporte ferroviario de componentes alcanza una valoración de 4,4 puntos.
Pese al impacto de la coyuntura, la patronal automovilística considera que el ferrocarril constituye un modo fundamental para la industria, ya que el año pasado ha copado un 36% del total de vehículos que se han transportado hasta los puertos españoles para su exportación a los mercados exteriores.
Entre los aspectos más valoradosdel modo ferroviario, Anfac destaca durante 2021 mejoras en el seguimiento de los servicios, una mejor atención al cliente y mejoras en la flexibilidad en las terminales.
Sin embargo, como elementos a mejorar, la patronal automovilística reseña la poca flexibilidad del modo para adaptarse a los cambios en los flujos y la dispersión entre operadores.