Muchos transportistas españoles temen que en un futuro se vuelva a repetir el calvario que ha supuesto el uso de unidades de gas natural en el último año.
Los empresarios del sector se han visto en muchos casos abandonados por la Administración después de que se les hubiera impelido a hacer una costosa transición energéticaque se ha visto relegada por un brutal aumento en los precios del gas desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania y por los bandazos legales que impiden hacer frente a cuantiosas inversiones con las debidas garantías, no ya de que se obtendrá un retorno, sino de que no se convertirán en pérdidas.
Pese a ello, el sector está convencido de que es necesario hacer frente al proceso de transición energética y de que hay que impulsar decididamente la sostenibilidad en el transporte de mercancías por carretera, tal y como se ha evidenciado en el Green Gas Mobility Summit que celebra Gasnam este mes de septiembre en Madrid.
En este contexto, y para evitar que se repita esta misma situación con otras energías alternativas actualmente en ciernes, los empresarios piden un apoyo más decidido de la Administración, así como más claridad en el marco legal, de tal modo que cuenten con un horizonte temporal despejado para amortizar sus inversiones en flotas más sostenibles.
Así pues, Juan Jesús Sánchez, de Disfrimur, ha abogado, en el encuentro de Gasnam, por que se aclare cómo se miden las emisiones y por que los poderes públicos den orientaciones claras al sector para tomar decisiones. Según su criterio, actualmente no hay combustible alternativo capaz de sustituir al diésel para servicios de larga distancia, aunque, en su opinión, una combinación de diferentes fuentes energéticas sí que será capaz de ir conformando nuevas posibilidades.
A su vez, Félix Ojeda, de Transportes Ojechar, pide un aprovechamiento eficiente de todas las tecnologías existentespara reducir las emisiones del transporte de una manera efectiva e inmediata. Así mismo, también reclama un impulso de la economía circular que permitiría aprovechar el potencial que ofrecen las granjas ganaderas para la producción de biogás, especialmente en empresas especializadas en alimentación animal como la suya.
Así mismo, Miguel Esteve, de Nuppec Logística, reclama más apoyo institucional, así como de los clientes para afrontar la transición energética y que no se repitan situaciones anteriores.
Por otro lado, Félix González, de Delgo, también hace hincapié en la necesidad de buscar un transporte más sostenible, aunque también apunta que la transición es un proceso caro que obliga a analizar muy bien sus costes.
En definitiva, los empresarios apuntan que España tiene unas buenas condiciones para aprovechar al máximo algunas energías alternativas como el biometano, los biocombustibles y el hidrógeno, así como la electricidad a través de fuentes de producción eólicas y solares, pero piden un modelo claro que permita exprimir al máximo todo el potencial del país y avanzar en una transición necesaria.