En los últimos días, el puerto de Tarragona ha enviado el primer tren cargado íntegramente de harina de soja a la Terminal Intermodal de Agrotim, en la localidad oscense de Monzón. Este envío, operado por Renfe, consta de 12 vagones, que transportan un total de 720 toneladas.
A Monzón ya llegaban trenes procedentes del puerto cargados con otros productos agroalimentarios para la fabricación de piensos y otros productos del sector agropecuario del hinterland tarraconense, por lo que esta operativa permitirá generar sinergías positivas con otros tráficos complementarios.
Este servicio ferroviario implica un fortalecimiento de la oferta en la logística de agroalimentarios y la consolidación de destinos como Huesca o Zaragoza, si bien este tipo de productos llegan desde el puerto a una amplia zona de influencia, que incluye también toda Cataluña y gran parte de Navarra y el este de Castilla.
El ferrocarril se ha convertido ya en una solución más sostenible y competitiva que el transporte por carretera para este tipo de productos, que se importan a través del recinto portuario para su transporte hasta las zonas de fabricación para la alimentación animal: Lérida, Zaragoza, Gerona y, en menor escala, Soria y Huesca.