Actualmente, el recinto aduanero del puerto de Melilla comprende la totalidad del enclave, exceptuando la zona abierta al público de la terminal de pasajeros, a partir del control de acceso de La Florentina.
A juicio de la Autoridad Portuaria, esta distribución impide el desarrollo de la actividad comercial que necesite el acceso del público en general, por lo que se ha previsto una segregación de espacios que configure un nuevo recinto aduanero más reducido, con una zona industrial y comercial de acceso controlado que de una mayor flexibilidad y posibilite la dinamización de dicho sector en el puerto.
Así pues, los responsables del enclave melillense han iniciado el diseño de las actuaciones necesarias para la segregación del actual recinto aduanero, con la licitación del contrato correspondiente a la redacción del proyecto de ordenación de zonas de seguridad de la dársena.
Este servicio comprendela definición y cálculo de nuevos vallados de delimitación entre ambos recintos, así como actuaciones necesarias para adaptar algunos tramos de vallados interiores existentes a las nuevas condiciones de seguridad para el nuevo recinto aduanero, el diseño y definición de las actuaciones necesarias para los nuevos accesos desde la actual rotonda de La Florentina y el diseño de un sistema de puertas en el control de acceso al recinto aduanero.
Todas estas labores, con un plazo de ejecución de tres meses, tienen un presupuesto base de licitación de 14.974,96 euros y un valor estimado de 14.399 euros.