El puerto de Barcelona ha completado el traslado de toda su operativa de cruceros y ferries desde el muelle Barcelona Nord, ubicado en el World Trade Center, hacia el muelle Adosado, una zona más alejada de la ciudad.
La transición, que afecta aproximadamente a 340 escalas anuales de cruceros y ferries, incluyendo los servicios de Balearia con las Islas Baleares, concluyó con la despedida del crucero World Navigator de la naviera Mystic Cruises.
El cierre del muelle Barcelona Nord para la operativa de cruceros y ferris forma parte de la estrategia del puerto de Barcelona y del ayuntamiento de la ciudad de alejar la actividad de cruceros de las zonas urbanas y concentrarla en el muelle Adossat.
Este no es el único paso dado en esta dirección por el puerto de Barcelona, ya que en 2018, cuando se firmó el acuerdo con el consistorio, se cerró la terminal de cruceros en el Maremagnum, reduciendo de ocho a siete las terminales operativas. Además, se limitó el número de escalas a un barco por terminal.
El puerto de Barcelona ha fomentado asimismo la llegada de cruceros modernos y más sostenibles, que en muchos casos utilizan combustibles más limpios como el GNL, reduciendo las emisiones de este tráfico.
También se han llevado a cabo obras en el muelle Adosado para concentrar toda la operativa de cruceros a partir de finales de 2026, cuando se cerrará la terminal actual del muelle Barcelona Sur.
La reubicación implica inversiones de más de 270 millones de euros, con 152 millones correspondientes a inversión pública y 125 millones a inversión privada. Por otro lado, se están realizando inversiones adicionales para electrificar el muelle Adossat, con un costo aproximado de 80 millones de euros.
Además de reducir las emisiones y la contaminación de los barcos, este movimiento del tráfico desde el área del World Trade Center hacia el Adosado abrirá el muelle Barcelona Norte a la ciudadanía, liberando 630 metros de línea de muelle y proporcionando a la ciudad de Barcelona más de 13,600 m² de nuevos espacios públicos, que estarán operativos una vez concluya la 37ª edición de la Copa América, en otoño de 2024.