Con motivo del cierre del proyecto Core LNGas hive, que ha permitido adaptar las plantas de regasificación españolas para el suministro de GNL a buques, se ha celebrado en Madrid un evento en el que se ha puesto en valor el papel de los puertos como puente energético para descarbonizar Europa.
Lucas González Ojeda, portavoz de la representación de la Comisión Europea en España, ha inaugurado la sesión, aludiendo a las fuertes inversiones que está realizando la Unión Europea en el transporte a través del mecanismo 'Conectar Europa'. En concreto, en el periodo 2021-2027, están previstas inversiones por valor de unos 33.000 millones.
Walter Goetz, responsable de gabinete de la Comisión Europea de Transportes que preside Adina Vălean, ha señalado la importancia de abordar proyectos de relevancia económica para la protección del medio ambiente, apostando por un modelo de cofinanciación entre la Unión Europea y los Estados Miembros.
En este sentido, se ha referido a las iniciativas llevadas a cabo en los últimos años en puertos como Bilbao, Ferrol o Barcelona y ha incidido en la necesidad de seguir explorando cómo proporcionar energía eléctrica a los buques mientras están atracados. También se ha referido a las posibilidades de descarbonización del biometano, el gas sintético y el hidrógeno.
El GNL como combustible de transición
Por su parte, Christian Faure, responsable de la implementación del mecanismo 'Conectar Europa' en el suroeste de Europa y el Benelux, ha aprovechado la ocasión para poner en valor el Pacto Verde Europeo y su importancia para la descarbonización del transporte, pues su implementación permitirá a Europa convertirse en el primer continente climáticamente neutro en 2050.
No obstante, queda mucho por hacer y sabiendo que casi el 80% de las mercancías en la UE se transportan por mar, es necesario abordar la reducción de emisiones en este ámbito para alcanzar los ambiciosos objetivos del plan. Para ello, son necesarias inversiones en renovación de flotas, en infraestructuras para combustibles alternativos y en conexiones de última milla.
El presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, y el director de activos de gas de Enagás, Claudio Rodríguez, han participado en la sesión.
Del proyecto Core LNGas Hive pueden sacarse valiosas enseñanzas en este contexto, dado que aún no existe el combustible perfecto para el transporte marítimo en términos de emisiones. El hidrógeno tiene un gran potencial, pero es importante seguir aprovechando las oportunidades que puede brindar el GNL, pues para que la transición sea rentable, deben utilizarse los combustibles que están disponibles.
"El GNL es parte de la solución", asegura Faure, y debe verse como un combustible de transición hasta que se desarrolle una nueva generación de combustibles bajos en carbono o sin carbono. En este sentido, de cara a la financiación de nuevas iniciativas de gas, se dará prioridad al bioGNL.
Además, ha insistido en que es necesario que los Estados Miembros garanticen la instalación de un número adecuado de puntos de repostaje de GNL en los puertos, principalmente en los que forman parte de la Red Transeuropea de Transporte, pues son la clave de la conectividad internacional y tienen un gran potencial para convertirse en centros de energía limpia para sistemas eléctricos integrados y combustibles bajos en carbono.
Desde la Comisión Europea, no consideran el término del proyecto Core LNGas hive un punto y final, sino más bien un punto y seguido, pues abrirá el camino a muchas más experiencias de este tipo.
El GNL en España
Claudio Rodríguez, director de activos de gas de Enagás, se ha referido a los avances en la materia del Estado español, donde el 40% de las mercancías pesadas transportadas pasan por los puertos y, en ese paso, emiten alrededor del 10% del CO2.
Gracias a esta iniciativa y a sus posteriores desarrollos, el uso del GNL como combustible en el transporte marítimo en la Península Ibérica evita ya la emisión directa de unas 34.000 toneladas de CO2 al año y de 1.865 toneladas de óxidos de azufre.
En seis años, Core LNGas hive y LNGhive2 han ayudado a impulsar un mercado de GNL como combustible, con una inversión total de 242 millones de euros. De hecho, la construcción de equipos de suministro y nuevos buques a GNL ha incrementado el volumen de bunkering en los puertos españoles, llegando en 2021 hasta los 142.523 m³, un 170% más que en 2019.
El presidente de Puertos del Estado, Álvaro Rodríguez Dapena, ha clausurado este evento, insistiendo en que con este fin de ciclo, se abre ahora una etapa "todavía más apasionante". Así, ha asegurado que los puertos del país están modificando su estrategia, que siempre ha estado ligada a conseguir su posicionamiento en la cadena de transporte, teniendo en cuenta la dimensión ambiental y social.
Ha definido al Core LNGas como un proyecto-país, que ha reunido a 42 socios del sector portuario, marítimo y gasista, tanto públicos como privados. La continuidad de la iniciativa deberá vincularse, según Rodríguez Dapena, a los combustibles alternativos, si bien muchos de ellos se encuentran en fase experimental.
Así, ha secundado a los representantes de la Comisión Europea y ha señalado que las investigaciones y avances realizados con este proyecto pueden tener todavía más recorrido si se busca seguir profundizando en el desarrollo de combustibles como el bioGNL o el gas sintético.
Si bien no ha restado valor a la importancia que ha adquirido el hidrógeno, sí ha expresado la necesidad de que los reguladores no apuesten todo a una tecnología determinada, sino a un objetivo.