A la izquierda, David Soto, director general de Mimpo en España, y, a la derecha, Carlos Delfín, consejero delegado de Mimpo.
Pocos meses después de iniciar sus operaciones en Madrid, el operador mexicano Mimpo quiere seguir ganando presencia en España, con el fin de ampliar la gama de servicios que ofrece a su importante base de clientes en el país, a corto plazo, y analizar la posibilidad de extender su actividad a otros países europeos, a más largo plazo.
Como afirma David Soto, director general de la compañía en España, la idea es abrir en un año y medio oficina en Bilbao y posteriormente en Barcelona, con el fin de desarrollar servicios de carga de proyecto y de graneles en el área de influencia del País Vasco, donde cuentan con una nutrida cartera de clientes.
Así mismo, la compañía también en pleno proceso de búsqueda de ubicación en el área metropolitana de Madrid para incorporar un almacén que le permita ofrecer nuevos servicios logísticos vinculados a las conexiones de carga aérea que ofrece el aeropuerto de Barajas, en conexión con México y otros destinos en el continente americano, toda vez que el negocio de carga supone el 70% del mix de la actividad de la sociedad en España, a los que habría que añadir otros 2.500 TEUs previstos en marítimo.
El 40% de las ventas de todo el grupo provienen de clientes españoles, principalmente de los segmentos de retail y de energías renovables, a los que ofrece, según Carlos Delfín, consejero delegado de Mimpo, un modelo de gestión logístico distinto y de alcance integral, con una plantilla integrada por más de 450 personas en el país norteamericano, nueve de ellas en la oficina española, además de con presencia en Costa Rica, Chile y los Estados Unidos, con almacenes que suman más de 120.000 m2 principalmente para mercancía seca.