El consumo de biocombustibles no despega en España.
Frente a los avances del sector de la automoción y la industria del transporte por carretera para lograr motores más eficientes que puedan funcionar con energía más sostenible, el consumo de los biocarburantes no termina de despegar en España.
De hecho, según revelan los datos recopilados por la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), el porcentaje de biocombustibles en los gasóleos se ha establecido en España durante los últimos tres años en el entorno del 4%.
En 2013, el nivel de biocombustibles en gasóleos fue del 4,02%, mientras que en 2014 fue del 4,22% y en 2015, a falta de conocer los datos de diciembre, se establece en el 4,33%.
Estas cifras, además, suponen un importante retroceso con respecto al 10,12% que se alcanzó en 2012. A excepción de mayo de 2014, en ningún mes desde abril de 2013 se ha superado la barrera del 5%.
Por otro lado, el consumo de mezclas de biodiésel como carburante para vehículos también ha experimentado un fuerte descenso durante los últimos años, al pasar de las 129.107 tn de 2012 a las 26.516 tn de 2013, para descender hasta las 16.117 tn en 2008.
Por su parte, el biodiésel normal ha experimentado la misma suerte. En el año 2008 se llegaron a consumir en España 100.785 tn de este carburante, que se redujeron hasta el entorno de las 40.000 tn anuales en el siguiente bienio, las 25.000 tn en los años 2011 y 2012, hasta las 5.000-6.000 tn anuales desde entonces.