La demanda de servicios de transporte de mercancías por carretera en España y Portugal ha iniciado una fase ascendente en 2014, en un contexto de crecimiento de la producción industrial, el consumo de los hogares y el comercio exterior.
En este marco, para el cierre de 2014, DBK estima en su informe sobre el Transporte de Mercancías por Carretera del mercado ibérico un volumen de negocio, en el conjunto del mercado ibérico, de 16.110 millones de euros, lo que supone un aumento del 3,6% respecto a 2013.
Por tanto, el transporte de mercancías en España y Portugal comienza a dar signos de recuperación después de dos años consecutivos de caídas. En 2013, el mercado se contrajo un 3,7% en España y un 2,3%, lo que supuso un retroceso del 3,5% en la península, si bien este fue menor que el descenso experimentado en 2012, del 6,1%.
Cambio de tendencia
Por contra, en 2014 se ha producido un cambio de tendencia, favorecido por el aumento moderado de la producción industrial y el consumo de los hogares, así como por el crecimiento de los intercambios comerciales con el exterior.
Por países, el mercado español muestra un comportamiento ligeramente más favorable, aumentando cerca de un 4%, mientras que el portugués podría contabilizar una tasa de variación en torno al 2,5%. En ambos países la actividad se ha visto impulsada por el dinamismo de la demanda asociada a operaciones de comercio exterior.
Las previsiones a corto plazo apuntan a una aceleración del ritmo de crecimiento de la actividad sectorial, así como a una mejora de la rentabilidad. A este respecto, la reducción del precio de los carburantes observada durante la primera mitad de 2014, y que previsiblemente se mantendrá a corto plazo, suavizará la presión sobre los márgenes de los operadores.
Concentración de la oferta
En diciembre de 2013 operaban en el mercado ibérico de transporte de mercancías por carretera 111.600 empresas, un 0,4% más que en el año anterior. En el sector se observa una tendencia de paulatina concentración de la oferta, si bien todavía se mantiene una marcada atomización, predominando las empresas de pequeño tamaño y con una reducida flota de vehículos.
Así, los cinco primeros operadores reunieron en 2013 una cuota sobre el valor total de las ventas en el conjunto del mercado ibérico de tan sólo el 9%, porcentaje que al considerar a los diez primeros se situó ligeramente por encima del 15%.
La atomización es más acusada en España, donde las diez primeras empresas alcanzaron en 2013 una cuota de mercado conjunta del 17,5%, frente al 25% contabilizado en Portugal.
El parque de vehículos de transporte público de mercancías en el mercado ibérico estaba formado por unas 341.000 unidades en 2013, casi 65.000 menos que en el ejercicio 2009.