Los estibadores lusos solicitan la readmisión de los trabajadores despedidos.
El Consejo Internacional de Estibadores (IDC) ha manifestado su apoyo a los trabajadores de los puertos de Lisboa, en Portugal, y Gothenburg, en Suecia, ante las huelgas que están llevando a cabo en protesta por lo que consideran una precarización de sus condiciones laborales por parte de las empresas que gestionan las terminales.
Recientemente, varios representantes del 'Sindicato dos Estivadores, Trabalhadores do Tráfego e Conferentes Marítimos do Centro e do Sul de Portugal' se han reunido con el coordinador general del IDC, Jordi Aragunde, para exponer la situación que están viviendo los trabajadores lusos.
En este contexto, cabe mencionar el despido de los estibadores de las terminales de TCSA y TCA, la contratación en precario de trabajadores sin experiencia que no formaban parte del pool de Lisboa, la ausencia de regularización de las condiciones laborales y la propuesta de disminución drástica de los salarios.
Por ello, el sindicado solicita la readmisión de los trabajadores despedidosy el cierre del pool alternativo con sueldos de 500 euros mensuales, con el fin de que sus trabajadores pasen a formar parte del ya existente.
También aspiran a negociar con las empresas concesionarias para lograr que las navieras no desvíen los tráficos a otros puertos, sobre todo al de Leixões o al de Setúbal.
Según los estibadores portugueses, la liberalización de los puertos que ha llevado a cabo el gobierno del país, ha conducido a "la entrega de los puertos al capital extranjero", concretamente a manos turcas, en el caso de Lisboa.
Por su parte, Aragunde ha señalado que el IDC se pondrá en contacto con las empresas concesionarias y con el ejecutivo del país para mediar en la situación "insostenible e injusta"que viven los trabajadores de Lisboa.
Huelga en el puerto de Goteburgo
Respecto al puerto sueco de Goteburgo, los trabajadores afiliados al sindicato local, que son miembros del IDC, han llevado a cabo tres jornadas de huelgas de 24 horas en las instalaciones de APM Terminals después que, tras las negociaciones iniciadas, no se haya producido ningún resultado.
Los estibadores exigen que la terminal respete la funcionalidad del sindicato y la negociación colectiva, facilitando el cumplimiento de los derechos laborales y de los acuerdos existentes.
En este caso, Aragunde intentará acercar posturas con la empresa, que ha confirmado que están lejos de un acuerdo, con el fin de fomentar la comunicación entre las dos partes y terminar con el conflicto.