Tras el anuncio del acuerdo de ayer entre el Gobierno y el Comité Nacional del Transporte, las organizaciones que integran a la cadena de valor del gran consumo defienden que "ya no hay ningún argumento que justifique continuar con el paro del transporte".
Por ello, piden "la desconvocatoria inmediata de un paro que ya no tiene ningún sentido y que, cada día que pasa, incrementa sus costes en términos económicos y de empleo para toda la cadena".
Según estas empresas, las ayudas acordadas "permiten afrontar con garantías un contexto de la máxima complejidad y atajar los problemas coyunturales que han afectado especialmente a un sector clave para la cadena de suministro, al conjunto de la economía y a los consumidores".
De igual modo, a su juicio, el acuerdo permite avanzar en la "viabilidad de los distintos modelos de negocio de un sector claramente atomizado", así como dar inicio a un período en el que "todas las partes de la cadena deberemos seguir trabajando, desde un modelo de colaboración, para mejorar también las cuestiones más estructurales del sector".
Sin embargo, en todo este argumento se pasa por alto que los convocantes del paro no han suscrito este acuerdo.