El Gobierno ha aprobado el 21 de diciembre, a propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica, un Real Decreto para digitalizar las redes de distribución de electricidad e impulsar la infraestructura de recarga para vehículos eléctricos, objetivo al cual se destinarán 525 millones de euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Las empresas distribuidoras que recibirán esta cantidad tendrán que implantar herramientas digitales de mejora de atención al consumidor, incluyendo sedes electrónicas para gestionar expedientes relativos al acceso y la conexión de instalaciones de autoconsumo y de puntos de recarga.
También deberán presentar planes con las estimaciones de sus inversiones sobre el empleo, la cadena de valor industrial y la contribución a la penetración de nueva generación renovable. Las cuantías anuales máximas ascenderán a 227 millones con cargo al Presupuesto General del Estado de 2021, 148 millones en 2022 y 150 millones en 2023.
El Plan de Recuperación financiará hasta el 50% de los activos relacionados con la digitalización de la red y con las infraestructuras necesarias para alimentar puntos de recarga rápida y cada compañía recibirá una ayuda proporcional al porcentaje de retribución regulada que recibe sobre el coste total de la actividad de distribución de electricidad.
Valoración de Anfac
Desde la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones, Anfac, valoran positivamente las medidas aprobadas para impulsar las infraestructuras de recargade vehículos eléctricos.
Consideran que aunque sea necesario un plan de ayudas para fomentar la compra de vehículos electrificados y la instalación de puntos de recarga, "no todo es una cuestión presupuestaria". En este sentido, entienden que es preciso ir más allá con medidas como las aprobadas, para simplificar la instalación y los procesos burocráticos asociados.
El hecho de que sea obligatorio para 2023 la instalación de puntos en parkings no residenciales privados y en otros no adscritos a edificios así como la instalación masiva en las estaciones de servicio y en terrenos circundantes a las carreteras del Estado refleja una vocación de cumplir unos objetivos de puntos de recarga y de que no todos estén en las capitales de provincia.
La Asociación ya ha puesto a disposición de las administraciones unos mapas para el despliegue de estas infraestructuras que pueden servir de modelo o guía para esta instalación no centralizada.
