La sentencia del Tribunal de Justicia de Luxemburgo (TJUE) sobre los estibadores españoles es "inminente" y probablemente será condenatoria contra España, según ha advertido este martes, el presidente de Puertos del Estado, José Llorca, quien ha emplazado a los grupos parlamentarios a afrontar una "reflexión conjunta" sobre el futuro de este sector para que no "desestabilice" la actividad de los puertos españoles.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Fomento del Congreso para explicar el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado de 2015 en lo que atañe a su departamento, y en respuesta a una pregunta del socialista Román Ruiz sobre el contencioso de la estiba.
Un proceso que se inició a raíz de una denuncia anónima planteada en 200, sobre la exclusividad que tienen los estibadores españoles en las labores de carga y descarga, y la elevó al TJUE al considerar que este sistema conculcaba las normas de la competencia.
El presidente de Puertos asegura que la sentencia "puede ser extremadamente inminente" y que, en todo caso, se conocerá antes de que finalice 2014, y además señala que por los "síntomas" que conoce el Gobierno actualmente,"es fácil que sea condenatoria para España".
Y es que, aunque el Ejecutivo comunitario "ha decidido no ir por la vía de la regulación" de la estiba, en el nuevo Reglamento de servicios portuarios que está preparando, dejando "a la voluntad de los estados miembros" este asunto, sí ha "decidido atacar el modelo de estiba" de algunos países como España o Bélgica, en concreto el del puerto de Amberes, por considerarlos "no acordes a los tratados fundacionales" de la UE.
En esas circunstancias, Llorca cree que será preciso abordar una reflexión conjunta sobre el modelo de estiba que necesita España y "cómo debe ajustarse a la legalidad europea" y a lo que diga el TJUE, para que el Gobierno pueda tomar decisiones en "los próximos meses".