El sector industrial e inmologístico ha alcanzado en el primer semestre de 2022 un volumen de inversión de 1.175 millones de euros, un 18% menos que en el mismo periodo de 2021, aunque es la tercera cifra más alta de la serie histórica.
Esta intensidad también se palpa en las Islas Baleares, debido a la evolución del e-commerce y del sector turístico, según datos de CBRE. La demanda se reactivó tras la incertidumbre observada en 2020, generando una rápida absorción de la oferta disponible, principalmente la de reciente construcción.
Esta demanda se concentra en los principales polígonos de Mallorca, concretamente los de Palma y alrededores, e Ibiza. No obstante, dado que la oferta de suelo industrial es absorbida rápidamente, aquellas empresas que desean establecerse en Baleares, generalmente en Palma e Ibiza, optan por adquirir suelo y desarrollar sus propias instalaciones o llegar a acuerdos 'llave en mano' con promotores locales.
Así se ha visto tanto en empresas vinculadas al e-commerce, como a las dedicadas al alquiler de vehículos y transporte de personas. La necesidad de amplios lugares donde manipular, gestionar y distribuir mercancías y donde aparcar y almacenar vehículos, hacen que busquen grandes suelos con potencial para desarrollos de instalaciones propias.
Asimismo, en el último año el producto obsoleto que salió al mercado con un precio adecuado, se ha vendido rápidamente con el objetivo de ser reformado, dada la escasa oferta de producto nuevo. No obstante, fondos nacionales e internacionales, que hasta ahora no habían mostrado interés por las islas, están en búsqueda activa para invertir en este producto.
Rentabilidad
En cuanto a las rentabilidades exigidas para producto industrial se sitúan entre el 7% y el 8%, llegando a situarse por debajo para las ubicaciones prime de Palma e Ibiza, así como para producto logístico en las ubicaciones más demandas.
El buen ritmo de absorción de producto finalista y de suelo generó un crecimiento de precios promedio de naves en alquilerdel 20%, con un amplio rango que varía entre los 4,5 y los 8,5 euros/m²/mes. En cuanto al producto en venta, este incremento se sitúa próximo al 30%, con valores entre 900 y 1.300 euros/m².