Los países más desarrollados han visto cómo ha evolución la economía B2C, 'Bussines-to-consumers': desde pequeñas tiendas de gestión familiar pasando por grandes mayoristas y minoristas a los gigantes como Wal-Mart. La última etapa es el desarrollo del e-commerce.
En China, sin embargo, se están omitiendo las etapas intermedias y se está produciendo directamente una transición entre las operaciones de gestión familiar y el comercio electrónico, según un estudio publicado por DHL Supply Chain.
Como consecuencia del creciente poder adquisitivo de la población china, los fabricantes nacionales están aumentando sus operaciones dentro del mercado doméstico, lo que está convirtiendo al país conocido por ser el fabricante del mundo, en su propia fábrica.
No obstante, el crecimiento del comercio electrónico y la demanda nacional de productos están generando grandes presiones sobre la inadecuada infraestructuras chinas de transporte y ha fracturado el mercado de servicios logísticos. Por ello, según DHL, con el objetivo de prosperar, los fabricantes y los minoristas chinos deben trabajar para crear cadenas de suministro nacionales más fuertes que proporcionen una integración más estrecha de todas las partes involucradas en las operaciones de transporte y de entrega.
En el artículo se señala que China necesita reequilibrar su economía a fin de hacerla más sostenible y menos vulnerable a los vaivenes de la demanda mundial. Así, se recoge que a pesar de que en el 2007 la tasa de crecimiento anual de China estaba en un 14,2%, durante el primer trimestre de 2014 se desplomó un 7,4%, debido a la crisis financiera global, que ha hecho disminuir la demanda de exportaciones.
Por ello, el crecimiento de la demanda interna es una oportunidad para la estabilización de la economía china. Las ventas minoristas crecieron un 12% durante el primer trimestre de 2014 en comparación con el mismo periodo de 2013, según Trading Economics, un aumento que los líderes chinos están decididos a continuar.
El auge del comercio electrónico
Gran parte de ese crecimiento se está produciendo en el negocio on-line. Una razón es que, según la Oficina Nacional de Estadísticas de China, el país tiene 618 millones de usuarios de Internet, es decir, alrededor de 46% de la población total, de los que 500 millones tienen teléfonos móviles que les permiten acceder a la web. Casi la mitad de los chinos tiene los mercados on-line en su mano.
Este crecimiento del e-commerce también habría sido alentado por los propios negocios tradicionales. En general, los chinos tienen poca fidelodad hacia las firmas nacionales que existen. De hecho, según DHL, en lugar de haber mega-tiendas en todas las ciudades medianas o grandes, hay cientos de miles de pequeñas tiendas minoristas de gestión familiar.
Las ineficiencias de los vendedores y la falta de economías de escala aumentan los costes para el consumidor. En conjunto, los altos costes y la débil fidelidad a las marcas provocan que la gente busque más valor por su dinero, y esta búsqueda se está realizando cada vez más de manera on-line.
Es el ejemplo de Alibaba.com, un negocio chino basado en el sector minorista on-line y en el comercio por teléfono móvil, y que actualmente maneja el 80% de los consumidores on-line y en el mercado doméstico chino. Sólo dos de sus portales juntos tienen más transacciones que la combinación entre Amazon.com y eBay.
Obstáculo, el transporte
Sin embargo, tanto los fabricantes como los minoristas chinos que están tratando de introducirse en el mercado doméstico se están encontrando con varios obstáculos en el transporte y en la logística del país, que aún siguen en las primeras etapas de su desarrollo.
A pesar de que China es uno de los líderes mundiales en el ferrocarril y en número de kilómetros habilitados para la circulación, la industria del transporte y la entrega está fragmentada, descoordinada y es muy poco competitiva, con muchas empresas que ofrecen servicios similares pero limitados. La 'última milla' de las entregas es una parte esencial del e-commerce, pero en China, es lenta y costosa, indica el artículo.
Por otra parte, los costes de transporte en el país son altos. Actualmente, el transporte tiene una cuota del 18% en el PIB de China, más del doble de lo que es en los Estados Unidos. Por tanto, en primer lugar es urgente que se reduzcan los costes de transporte, ya que actúan como un freno a las ventas nacionales al elevar el coste total de los bienes.
Para ello, el gobierno de China tiene que involucrarse más en el aumento del alcance del transporte y de los servicios de entrega y reducir sus costes. El país ha realizado grandes inversiones en carreteras y autopistas, ferrocarriles, aeropuertos y puertos. Si bien los resultados han sido impresionantes, todavía hay mucho que hacer.
En este sentido, DHL señala que, por ejemplo, los peajes son altos y pueden suponer entre el 30 y el 40% de los costes de transporte por carretera, por lo que encontrar maneras para reducir los peajes ayudará a disminuir ese 18% de cuota de transporte de PIB.
Además, la comunidad empresarial también debe involucrarse. Los fabricantes y los minoristas pueden resolver algunos de los problemas logísticos nacionales logística mediante la consolidación del número de proveedores de transporte y logística que utilizan.
Oportunidades para la logística
Según un directivo del sector logístico, China tiene ocho millones de empresas de transporte por carretera, seis millones de ellas con un solo camión, mientras que los resultados de una encuesta realizada por la consultora A.T. Kearney muestran que, de media, las empresas chinas utilizan 12 proveedores de transporte y cinco de almacenamiento.
La decisión de consolidar el proveedor, ya sea uno que opere en en el propio almacén del fabricante o el retailer, o se subcontrate un 3PL, deberían crear sinergias a través de la fusión del transporte, el almacenaje, la planificación, el seguimiento y otras funciones.
Tal vez impulsadas en parte por esta necesidad, las oportunidades para los proveedores de logística a terceros en China están aumentando, y el número de proveedores nacionales e internacionales está creciendo rápidamente. Sin embargo, en un gigante geográfico como China, lo más grande es definitivamente mejor, ya que conducirá a una mayor eficiencia y a la creación de economías de escala.
Para proporcionar estas mayores eficiencias, los proveedores de servicios logísticos en China deben considerar la creación de ofertas de servicios logísticos completos, que incluyan el envasado o la reparación de los productos en la logística inversa. Según el estudio de la A.T. Kearney, las empresas de logística que puedan almacenar, recoger, clasificar, embalar y entregar los productos de acuerdo a las cambiantes necesidades de los clientes tendrán una ventaja competitiva en la economía china.