El comercio mundial de mercancías parece recuperar el tono y apunta a que está recuperando su línea en la segunda mitad de 2023, según los registros de la Organización Mundial del Comercio, pese al alto grado de incertidumbre que domina el panorama económico global
Así pues, el Barómetro del Comercio de Mercancías que elabora la institución se coloca a finales de septiembre con un valor de 100,7 puntos, ligeramente por encima del indicador cien, que marca el límite entre una tendencia al alza y la evolución a la baja, y también por encima de los de 2022.
La evolución del índice mejora en el segundo semestre de 2023 tras un segundo cuarto de año plano, gracias sobre todo a las mejores perspectivas en las dos principales economías del planeta, los Estados Unidos y China, de tal modo que parece consolidarse que a final del ejercicio el comercio mundial acabará con un crecimiento de un 0,8%, pese a la debilidad de la evolución en Europa.
Con más detalle, los componentes del indicador presentan un comportamiento heterogéneo. En este sentido, el de la producción automovilística crece hasta alcanzar un valor de 110 puntos, mientras que el de componentes electrónicos también queda colocado en los 109,8 puntos.
Al tiempo, el indicador de pedidos de exportación registra un índice de 99,4, mientras que el indicador de tráfico marítimo de contenedores suma 99,4 puntos y el de carga aérea también 100,4 puntos, de tal modo que todos ellos quedan por debajo de la tendencia global del último registro.
A su vez, el indicador de materias primases el que peor evolución presenta de todos los analizados por la institución, con 95,6 puntos.