Los últimos meses de 2022 han marcado un importante retroceso del comercio mundial de mercancías, mientras que el inicio del presente 2023 también apunta a una consolidación de esta tendencia bajista, según los registros de la Organización Mundial del Comercio.
Así pues, el Barómetro del Comercio de Mercancías que elabora la institución se coloca a finales de diciembre con un valor de 92,2 puntos, por debajo del indicador cien, que marca el límite entre una tendencia al alza y la evolución a la baja.
Con más detalle, todos los componentes del indicador se encuentran por debajo de ese nivel de cien, salvo el de la producción automovilística, que ha alcanzado un valor de 105,8 puntos.
Al tiempo, el indicador de pedidos de exportación registra un índice de 97,4, mientras que el de tráfico marítimo de contenedoresse coloca con 89,3 puntos y el de carga aérea con 87,8. En estos dos últimos casos, además, la OMC apunta a que los indicadores muestran una clara tendencia a la baja.
Según la institución esta tendencia apunta que la debilidad en el comercio mundial de mercancías está extendida por todo el planeta y que, además, también afecta a muy diversos sectores.
Sin embargo, en su análisis, la OMC también apunta a que la mejora que se registra en la actividad portuaria en tráficos de contenedores en China, así como los buenos datos que se registran en los indicadores adelantados de pedidos para la exportación señalan que esta tendencia bajista podría tener los días contados, a medida que se recupera la actividad industrial.
