El ataque mediante 'ransomware' ha afectado seriamente los sistemas de TNT Express.
Las consecuencias del ciberataque llevado a cabo el pasado 28 de junio mediante el virus ‘Petya’siguen desvelándose, y en este caso se han dado a conocer más detalles de los problemas causados a FedEx, tras las primeras informaciones.
La filial con sede en Holanda TNT, adquirida el pasado año a cambio de 4.400 millones de euros, ha recibido un impacto significativo en las operaciones de su división TNT Express, complicando la gestión de los paquetes y ralentizando su actividad.
El ciberataque ha devuelto a TNT Express al procesamiento manual de algunas tareas y es probable que haya información que sea imposible de recuperar, lo que está afectando a la capacidad de la división para gestionar pedidos y afectará a los resultados de su matriz americana.
El impacto, tanto financiero como a nivel de seguridad, sigue siendo evaluado. Lo que ya es seguro es que la cuota de mercado se ha visto reducida en favor de sus rivales UPS y DHL. Uno de los segmentos más afectados es la capacidad de seguimiento de pedidos, y el retroceso de nuevo al papel han lastrado la agilidad en la gestión de pedidos.
FedEx ha reconocido que no dispone de seguro para cubrir el impacto del ataque en sus cuentas, y que no tiene constancia de que se hayan robado datos de terceros, a pesar de no poder asegurarlo.
Los sistemas del resto de FedEx no se han visto afectados, pero se desconoce cuando se podrán restablecer completamente los servicios de TNT.