En la reunión mantenida en la sede del Ministerio de Economía y Hacienda este jueves entre el director general de Tributos Jesús Gascón, a la que asistió también Manel Villalante director general de Transporte Terrestre, y las organizaciones nacionales de transportistas representadas por el CNTC y Fenadismer, el gobierno español ha confirmado que subirá la fiscalidad del gasóleo para las empresas transportistas a finales del presente año.
Así a partir del 1 de enero de 2012 entrará en vigor un incremento de 2,8 céntimos por litro la fiscalidad del gasóleo para las empresas transportistas tanto de mercancías como de viajeros (camiones, autobuses y taxis), que hasta la fecha percibían dicha diferencia a través de la devolución del gasóleo profesional. Esto es consecuencia de la aplicación, a partir del 1 de enero de 2012, de la vigente directiva europea 2003/96(descargue el documento de 213 Kb) del 27 de octubre del 2003, relativa a fiscalidad sobre los productos energéticos.
Defensa del gasóleo profesional
Asimismo durante el encuentro, los representantes del gobierno español han confirmado que España defenderá ante la Unión Europea el mantenimiento de la figura del gasóleo profesional, de cara a una futura modificación de la Directiva europea sobre fiscalidad de los carburantes, frente a la pretensión de la Comisión Europea que plantea su eliminación.
Se da la circunstancia de que la oposición de España, junto con la de otros países como Francia, Alemania, Italia y Bélgica, pueda impedir la supresión del gasóleo profesional, ya que para su aprobación en el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros de la Unión Europea (Ecofin), se precisa que sea adoptado por unanimidad.
En contra de la Euroviñeta
Por otra parte, los representantes de la Administración también se han manifestado en contra de la aplicación de la euroviñeta reconociendo, en línea con lo defendido por las asociaciones profesionales, que el sector del transporte de mercancías por carretera cubre sobradamente con sus impuestos los costes externos y de infraestructuras que genera.
Tanto la eliminación del gasóleo profesional como la puesta en marcha de la euroviñeta acarrearían efectos negativos inmediatos en la competitividad de toda la economía española al encarecer el precio de todos los productos, dado que el 85% se transporta por carretera, dificultando las exportaciones como consecuencia de la situación periférica de España.