DP World ha reanudado este lunes sus operaciones en Australia, tras haber tenido que paralizar su actividad durante tres días a raíz de un ciberataque que ha tenido graves consecuencias.
El terminalista desconectó sus sistemas al detectarse el ataque el viernes, lo que impidió a los camiones descargar o recoger mercancías en sus terminales de Sydney, Melbourne, Brisbane y Fremantle.
Ahora, aunque las operaciones se han reanudado, la investigación en curso y las medidas adoptadas para proteger las redes y los sistemas pueden causar algunas interrupciones temporales en los servicios en los próximos días.
Los puertos se han convertido últimamente en objetivos reiterados de los ciberdelincuentes, como recuerdan desde Splash247. El sector marítimo sigue siendo un blanco fácil y los costes que suponen tanto los propios ataques como los rescates exigidos se han disparado en el último año.
En julio, por ejemplo, el puerto japonés de Nagoya sufrió un ataque de 'ransomware', y en abril, tres puertos canadienses habían sido atacados. Igualmente, las pasadas Navidades, el puerto de Lisboa se vio afectado por 'ransomware'y Jawaharlal Nehru Port Trust, el puerto de contenedores más activo de la India, también sufrió un ataque de este tipo en 2022.
Un informe del bufete de abogados HFW y la empresa de ciberseguridad marítima CyberOwl revela que el ciberataque medio en el sector marítimo acaba costando a la organización afectada unos 550.000 dólares. También muestra que las peticiones de rescate han aumentado en más de un 350%, con un pago medio de 3,2 millones de dólares.
