La Guardia Civil ha acabado con una organización criminal dedicada a transportar droga hasta Francia, tanto por vía marítima como terrestre. A los detenidos se les imputan los supuestos delitos de tráfico de drogas, pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales y falsedad documental.
En el marco de la operación 'Kime' las fuerzas de seguridad han detenido a once personas y han intervenido tractoras, semirremolques frigoríficos, un yate y una embarcación semirrígida.
Como informa la Benemérita, el dispositivo se inició en septiembre, cuando los agentes sospecharon que el propietario de una empresa de transportes por carretera de productos perecederospodría estar utilizando los camiones para transportar droga con destino a Francia.
Fruto de las investigaciones, se tuvo conocimiento de que un conductor, miembro de esta organización, conducía un camión con destino a Francia que se interceptó en la aduana de Montpellier y en el que se encontró un doble fondo con más de 390 kilogramos de hachís y casi 100 kilogramos de marihuana al vacío.
Posteriormente, agentes de la Guardia Civil procedieron a dar el alto a un vehículo en la AP-7, que pertenecía a una empresa de construcción y en el que se hallaron 250 kilogramos de hachís.
Según la Guardia Civil, los camiones que usaban la organización tenían semirremolques frigoríficos con un sistema hidráulicoque conseguía la apertura de una parte del semirremolque en la que se ocultaba la droga.
Así mismo, los frigos utilizados para cometer los delitos tenían los números de bastidores borrados y las placas de matrícula no correspondían con los titulares.
Por otra parte, las fuerzas policiales también han descubierto que esta banda también utilizaban una embarcación provista con dobles fondos, para traer al municipio valenciano de Oliva hachís desde Ibiza y Formentera.