Tras el éxito cosechado en un proyecto piloto previo, DB Schenker ha introducido en su almacén de Eching, situado en Múnich, su primera carretilla elevadora autónoma.
Este dispositivo, de la marca austriaca Agilox, puede transportar contenedores vacíos a una distancia de 150 metros sin intervención humana. Su implementación en sustitución de las carretillas elevadoras convencionales puede facilitar el trabajo de los empleados, gracias a la automatización de los procesos.
El equipo es capaz de realizar funciones simples en el almacén, dejando las más complejas a los trabajadores, lo que ayuda a repartir la carga de trabajo. En este caso, el almacén en el que se utilizará suministra piezas de vehículos para un fabricante de automóviles, pero se está estudiando la posibilidad de emplear en otros centros de trabajo esta tecnología.
Agilox está equipado con una horquilla de altura ajustable para levantar y bajar contenedores, por lo que no es necesario colocarlos manualmente en el AGV. Además, puede grabar un mapa de navegación local y dispone de un software inteligente para que los empleados puedan configurar las áreas operativas y zonas de seguridad, o marcar áreas de almacenamiento y estacionamiento.
Por su parte, los sensores y cámaras instalados garantizarán que el vehículo pueda reconocer y evitar los obstáculos a su paso.