Daimler Truck da a conocer esta semana a su red y al sector su oferta de vehículos comerciales e industriales eléctricos con un evento que se celebra en la región portuguesa de El Algarve.
La marca realiza en esta región del sur del país luso demostraciones de sus eCanter, eConic y eActros, modelos que proponen diversas soluciones para impulsar la electrificación en diferentes segmentos del transporte de mercancías por carretera.
Antonio García-Patiño, consejero delegado de Daimler Truck Iberia, ha analizado durante el evento el panorama de la electrificación en Europa. García-Patiño ha destacado el esfuerzo que han realizado los fabricantes de vehículos industriales en las dos últimas décadas para reducir las emisiones contaminantes y ha reclamado un esfuerzo institucional para impulsar una necesaria modernización de la flota.
En este sentido, para el consejero delegado de Daimler Truck Iberia el problema, por lo que respecta a los vehículos de transporte de mercancías, “no está tanto en el diésel, sino en la antigüedad del parque”.
A su juicio, las marcas han hecho sus deberes y están en disposición de ofrecer unidades eléctricas con costes totales de adquisición similares, o incluso inferiores, a las modelos equivalentes con motores de combustión.
De igual manera, García-Patiño también ha llamado a incrementar sustancialmente la red de infraestructuras de recarga, elemento clave a su juicio para que la electrificación se despliegue totalmente. Además, también se ha referido a la importancia que tiene el origen de la energía para medir adecuadamente las emisiones de los vehículos.
Por otra parte, García-Patiño ha anunciado que la marca abrirá para pedidos un nuevo vehículo eléctrico de larga distancia, de 500 kilómetros de autonomía, en septiembre, con el fin de que el modelo entre en producción en noviembre de 2024, así como una unidad de hidrógeno para la segunda mitad de esta década. En esta misma energía, la marca alemana también estudia la posibilidad de desarrollar un motor de combustión alimentado por hidrógeno.
Antonio García-Patiño, consejero delegado de Daimler Truck Iberia, ha analizado el proceso de electrificación del transporte en Europa.
Avances en electrificación
Durante el evento en Portugal se han podido probar distintas unidades de los modelos eCanter, eConic y eActros. Todos ellos ofrecen una conducción suave, con un rendimiento eficaz y sin ruidos. Los tres modelos equipan un eficiente sistema regenerativo que permite alargar la autonomía con una conducción adecuada.
Así mismo, los modelos más pesados, eConic y eActros, incorporan un sorprendente y bien trabajado sistema de frenado con hasta cinco grados de intensidad denominado One Pedal y que permite prescindir casi totalmente del uso del pedal de frenado, algo de gran importancia en servicios urbanos, como los que cubren estas unidades.
El eCanter, por su parte, llega a su segunda versión con una clara vocación por la versatilidad que ha permitido a Fuso ser la primera marca en crear unidades eléctricas de toda su gama. Así pues, el modelo ya cuenta con dos cabinas, cuatro variantes de peso, que van desde las 4,25 a las 8,55 toneladas, seis distancias entre ejes y tres paquetes de baterías que ofrecen entre 79 y 200 kilómetros de autonomía. Con todo ello, el eCanter ofrece 23 versiones diferentes con las que se quiere cubrir un amplio abanico de servicios.
A los mandos de estas unidades eléctricas de la marca puede comprobarse la evolución que supone para el transporte la electrificación en cuanto a modo de conducción, que habrá de prestar más atención a la eficiencia en el consumo energético bajo nuevos parámetros más centrados en la conservación de la energía almacenada en las baterías, y en cuanto a servicios, por todo el ecosistema que envuelve a los vehículos de transporte eléctricos, incluyendo servicios de asesoría, gestión de subvenciones y proyectos para instalaciones de recarga, entre otros aspectos, con los que marcas como Daimler intentan ofrecer soluciones de ayuda integral a sus clientes para hacer con éxito el camino que lleva a la transición energética.
En definitiva, la electrificación supone un cambio trascendental que está dando sus primeros pasos. Como tal se enfrenta a muchas incertidumbres, incongruencias y retos. El esfuerzo industrial está dando lugar a modelos cada vez más adaptados a las necesidades de los transportistas, pero este proceso requiere, tanto por inversiones a realizar, como por el cambio cultural que implica, de un apoyo institucional decidido que vaya más allá de poner objetivos de reducción de emisiones y que implica hacer una transición con una neutralidad tecnológica que permita llegar a todos los actores del sector.