Según los datos del operador postal público, durante los siete primeros meses de 2022, los carteros rurales de Correos han realizado un total de 404.289 operacionesa domicilio y en las oficinas auxiliares que atienden en los pueblos del país.
Entre los servicios realizados, además del envío de cartas, tanto ordinarias como certificadas o urgentes, también se ha cubierto la gestión de otras operaciones como la venta de embalajes y sellos, el envío de paquetería, el cobro de recibos y el envío o recepción de dinero, el pago de tributos, gestiones de servicios de luz y telefonía, trámites con la DGT, acceso a compra de billetes de tren, a la oferta de aseguradoras y de Correos Telecom, así como la venta de lotería de Cruz Roja.
La plantilla de reparto rural de Correos está formada por 6.011 carterosa los que se ha dotado con dispositivos portátiles para ofrecer a domicilio servicios que hasta ahora solo se prestaban en las oficinas de Correos.
La empresa pública defiende que la mejora tecnológica en los terminales portátiles para el reparto rural ha habilitado a este colectivo y ha aumentado su capacidad de ofrecer productos y serviciosa los habitantes de los pueblos, mejorando la eficiencia del operador público en el ámbito rural menos poblado.
Al tiempo, Correos estima que de este modo los carteros rurales adquieren protagonismo, mientras que el operador dice seguir trabajando para diversificar su actividady acercar sus servicios a la ciudadanía.