Un informe reciente elaborado por expertos del Grupo de Interés Común de Descarbonización de la Aviación del International Transport Forum, ITF, ha señalado una serie de recomendaciones para promover la producción y el uso de combustibles sostenibles para aviación, SAF.
Estos combustibles, capaces de reemplazar los tradicionales y fósiles, tienen el potencial de reducir significativamente las emisiones de dióxido de carbono(CO2) provenientes de las aeronaves.
La aviación, que se ha comprometido a alcanzar la neutralidad de carbono para el año 2050, reconoce en los SAF la tecnología de combustible de bajo carbono más viable en la actualidad, especialmente para vuelos de larga distancia, responsables de la mayor parte del consumo de combustible en el sector.
Diversos gobiernos ya han implementado políticas para fomentar la adopción de SAF y las experiencias previas con políticas similares en el transporte por carretera han permitido establecer mecanismos eficaces para reducir los costos de producción de estos combustibles sostenibles.
Las recomendaciones clave incluyen la necesidad de invertir en SAF para disminuir los costos de producción y facilitar su uso generalizado. Además, se destaca la importancia de apoyar todas las tecnologías y tipos de materias primas sostenibles que ofrezcan reducciones creíbles de emisiones.
En línea con el objetivo global de alcanzar emisiones netas cero para 2050, se hace hincapié en la necesidad de ampliación de marcos existentes para el uso de SAF en la industria aeronáutica. Sin una mayor ambición política, señala el documento, la industria corre el riesgo de no alcanzar los objetivos climáticos internacionales.
El informe también subraya la importancia de aprovechar las oportunidades para el desarrollo industrial y la resiliencia del suministro de energía, así como la necesidad de crear estrategias de descarbonización que incorporen a todos los sectores de transporte para maximizar el ahorro de emisiones.
Estas recomendaciones buscan impulsar la adopción de los SAF y fomentar la colaboración entre gobiernos y empresas del sector de la aviación para alcanzar los objetivos de descarbonización y reducir significativamente las emisiones de la industria de la aviación.