La Comisión Europea financiará, a través de la iniciativa 'Fuel Cell and Hydrogen Joint Undertaking' el proyecto para la creación de un ecosistema del hidrógeno verde, Green Hysland, en las Islas Baleares, que se iniciará en 2021 y finalizará en 2025. La subvención ascenderá a 10 millones de euros, lo que supone la segunda mayor concedida a un proyecto de hidrógeno verde y la primera a un país mediterráneo.
Será el primer proyecto estratégico del sur de Europa en este campo y permitirá distribuir en Mallorca al menos 300 toneladas de hidrógeno renovable al año, producido a partir de energía solar. El objetivo es reducir las emisiones de CO2 de la isla en hasta 20.700 toneladas al año.
Además, se realizarán estudios y modelos de negocio para replicar el proyecto en otras islas dentro y fuera de la Unión Europea: Tenerife, Madeira, Aran, en Irlanda, Ameland, en los Países Bajos, y las Islas Griegas.
En el caso de Mallorca, el hidrógeno tendrá múltiples aplicaciones, por ejemplo para el suministro de combustible a flotas de autobuses y vehículos de alquiler de pila de combustible, la generación de calor y energía para edificios comerciales y públicos, el suministro de energía auxiliar en ferries y operaciones portuarias, y la creación de una estación de abastecimiento.
También se valorará la posibilidad de que parte de este hidrógeno verde se inyecte en la red de gasoductos de la isla, a través de un Sistema de Garantía de Origen, para descarbonizar el suministro de gas. La iniciativa requiere una inversión total de aproximadamente 50 millones.
Consorcio de 30 socios
El consorcio para la puesta en marcha de la iniciativa está formado por 30 socios de 11 países, del ámbito industrial, científico y del sector público. Toda la cadena de valor está representada, lo que asegura tanto el despliegue de la infraestructura para la producción de hidrógeno verde como su uso en aplicaciones finales.
Coordinado por Enagás e impulsado por Acciona, Cemex y Redexis dentro de un plan de reindustralización de los terrenos de Cemexen Lloseta, su desarrollo se basa en una planta de generación de hidrógeno verde de Acciona y Enagás.
El proyecto está alineado con el plan del Gobierno para impulsar el hidrógeno verde y con la estrategia del hidrógeno de la UE en lo que respecta al desarrollo de clústers locales de hidrógeno, islas y ecosistemas regionales.