El tráfico de contenedores en el puerto de Barcelona ha registrado más de 1,8 millones de TEUs.
El puerto de Barcelona ha manipulado hasta el mes de octubre un total de 41 millones de toneladas, un 6% que en el mismo periodo de 2015, alcanzando unos resultados positivos para todos los segmentos de su actividad portuaria.
En este contexto, destaca el crecimiento en el tráfico de contenedores, que en los primeros diez meses del año ha aumentado un 16% y ha registrado un tráfico de más de 1,8 millones de TEUs.
En concreto, los contenedores de importación han registrado 441.036 TEUs, lo que ha supuesto un crecimiento del 10% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, mientras que los contenedores de exportación han aumentado un 4%, hasta situarse en 566.614 TEUs.
Estos resultados responden al "dinamismo" de los intercambios entre el puerto de Barcelona y sus principales socios. Así, entre los 15 primeros países con relaciones comerciales con el enclave barcelonés, 12 han incrementado su comercio exterior con la infraestructura catalana.
Algunos de ellos lo han hecho de manera significativa. Es el caso de China, que registra un incremento del 10%,Estados Unidos, con un aumento del 8%, India, con un 10% más, Arabia Saudí, con un crecimiento del 9%, Japón, con un 9% más, México, con un incremento del 8,5% o Brasil, con un 14% más.
En cuanto al tráfico de automóviles, durante los diez primeros meses del año el puerto de Barcelona ha transportado 761.908 unidades, procedentes en su mayor medida del comercio exterior. Así, el volumen más importante corresponde a las exportaciones, que han crecido un 3% hasta alcanzar los 387.462, mientras que las importaciones se sitúan en 169.387 unidades, con un aumento del 20%.
Por su parte, en cuanto al tráfico de graneles líquidos, el puerto de Barcelona ha registrado un tráfico total de 9,7 millones de toneladas, lo que supone un incremento del 1% respecto al ejercicio anterior. Destaca, en este sentido, el crecimiento del 27% del gasoil, con 2,3 millones de toneladas.
Los graneles sólidos, por su parte, han registrado un tráfico en la instalación catalana superior a 3,6 millones de toneladas, lo que supone un incremento del 3% con respecto a 2015.
Finalmente, el tráfico de pasajeros en el enclave barcelonés ha aumentado un 9%, con un total de 3,6 millones de pasajeros, de los que 1,1 millones son usuarios de ferrys de línea regular y 2,4 millones son cruceristas.