El sector del transporte ya propuso formar un frente común a las poblaciones afectadas por la siniestralidad de la N-340.
La Asociación Española de Empresarios de Transportes Bajo Temperatura Dirigida, Atfrie, ha denunciado los argumentos esgrimidos por el Real Automóvil Club de Cataluña, RACC, para conseguir el desvío del tráfico de vehículos pesados de la N- 340 a la AP-7, pagando el correspondiente peaje aunque bonificado un 50%.
Así, según la asociación, el RACC debería "clarificar las bases de su declaración", en la que sostenía que los transportistas "saldrían doblemente beneficiados", ya que se reduciría drásticamente la siniestralidad, a un coste cero para la Administración, y se acortaría el tiempo de viaje y el consumo de combustible.
Sin embargo, desde Atfrie, su secretario general Javier de Mauricio considera que, con este tipo de argumentos, el ciudadano puede llegar a "afirmar" que los transportistas son los que "producen las preocupaciones en la tranquilidad" de sus viajes. "¿Por qué el RACC no publica el tipo de vehículos siniestrados, tipo de personas que conducían, horas en las que se producen los siniestros y el resultado de los atestados de las autoridades de tráfico?"se preguntan desde la asociación.
Además, según la asociación, habría que tener en cuenta los costes del trasvase de los turismos de una vía a otra, por lo que, finalmente, sí habría un coste para la Administración. "¿O necesitan algún ejemplo de otras comunidades".
Por ello, desde Atfrie se ha insistido en continuar con la solución propuesta por el Ministerio de Fomento, que supone la mejora de los firmes, el desdoblamiento de las vías, la mejora de las señalizaciones horizontales y verticales, etc.
Lo que pretende el RACC, concluye de Mauricio, es "cautivar un tráfico que obligatoriamente tiene que circular porque es la herramienta de su trabajo" y lanza al aire la pregunta de si "el RACC bajaría las cuotas, primas. etc ¿o esto no cuenta?".