APM Terminals ha completado la adquisición de las terminales portuarias y ferroviarias de la compañía española Grup Marítim TCB, en una operación valorada en 1.000 millones de dólares, más de 900 millones de euros.
Aunque el terminalista se encuentra a la espera de aprobación para tres de las 11 terminales del grupo, se ha decidido continuar con la adquisición, ya que las terminales restantes constituyen menos del 5% del valor de la transacción.
La operación, por tanto, viene a sumar ocho puertos, con un volumen total ponderado por participación de dos millones de TEU, a los 72 puertos operativos en 69 países que gestiona la compañía.
Esta adquisición incrementa el tráfico del grupo un 7%, situándose además en ubicaciones clave con las terminales españolas de Barcelona, Valencia, Castellón y Gijón, la mexicana de Yucatán, la brasileña de Paranagua, la colombiana de Buenaventura y la de Quetzal en Guatemala, que se encuentra actualmente en construcción y estará operativa este 2016.
A lo largo de los próximos cinco años, la compañía invertirá unos 400 millones de dólares, más de 360 millones de euros, en actualizar y ampliar estas terminales.
A por las tres instalaciones restantes
En septiembre de 2015, APM Terminals llegó a un acuerdo con Perez y Cia para adquirir su participación mayoritaria del 61% en Grup TCB. Un mes más tarde, los accionistas minoritarios restantes acordaron vender sus acciones, lo cual dio como resultado que la compañía se convirtiera en el único accionista controlador de la compañía española, a la espera de las correspondientes aprobaciones.
Ahora, el terminalista sigue pendiente de la aprobación para la adquisición de la terminal de Turquía que, al igual que las dos terminales de las islas Canarias, no se encuentra incluida en la operación cerrada este miércoles 9 de marzo.