El Covid-19 ha puesto de manifiesto la escasa digitalización de muchas plantas y cadenas de suministro. La magnitud de la disyunción ha obligado a las empresas a adoptar nuevas formas de trabajo y acelerar las implementaciones en la nube para escalar de manera rápida y segura, potenciar el teletrabajo y proporcionar flexibilidad a sus procesos.
Cualquier organización que no reevalúe su infraestructura de tecnologías de la información para crear un negocio más resistente terminará por fracasar, dicen desde OpenText, pero la buena noticia es que están preparadas para el desafío.
De hecho, en 2018, un estudio realizado por Tech Pro Research señaló que las empresas del 70% de los encuestados tenían una estrategia de transformación digital en marcha o estaban trabajado en una.
Por otro lado, los fabricantes tienen un nuevo reto por delante: lograr que las cadenas de suministro sean más éticas y sostenibles. Conseguir una cadena de suministro sostenible requiere también niveles extremadamente altos de transparencia y visibilidad en la red de proveedores.
Además, solamente mediante la creación de procesos digitales se pueden monitorizar y gestionar adecuadamente áreas como los contratos y condiciones de los trabajadores, la procedencia de los materiales, el impacto medioambiental o los procesos financieros.
El valor de usar una plataforma basada en la nube puede mejorar drásticamente cualquier negocio y las empresas del sector que aprovechan la oportunidad pueden lograr una posición de mercado más sólida frente a sus competidores.